Revisando en la actualidad, encontramos muchas películas que se ganaron el título de clásicos en circunstancias diferentes; algunos la hicieron para el público mainstream y otras han alcanzado el estatus de culto desde hace algunos años, siendo cada historia la protagonista de un viaje diferente que las llevó a lo que son hoy en día. Pero no todas las películas han pasado por las mismas situaciones de éxito o fracaso ya que cada experiencia para sus creadores ha sido diferente.
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No obstante, cuando han pasado muchos años desde el estreno de una película es difícil saber si fueron igual de queridas y apreciadas durante su lanzamiento al igual que en la actualidad. De hecho, parte del atractivo del cine es que siempre existen las segundas oportunidades para las películas que pasaron desapercibidas o fueron duramente criticadas en su momento pero sobrevivieron para convertirse en historias mucho más respetadas. Clásicos como Cabeza de Borrador - 
91%, el debut de David Lynch, entraron en escena causando alboroto y ganándose el desprecio de muchos, pero con el paso del tiempo se convirtieron en íconos.
Innumerables películas que consideramos clásicos en estos días fueron completamente odiadas cuando se estrenaron por primera vez. Desde fracasos en taquillas hasta polémicos lanzamientos que pasaron a la historia por el caos que produjo en cines, algunos de estos títulos imprescindibles se ganaron una mala fama en sus primeros días en la cartelera y en los años siguientes, pero poco a poco el público cambió su opinión hasta lograr reivindicar cada una de estas producciones.
A continuación, les contaremos los detalles sobre estas películas que actualmente son amadas por el público a pesar de que fueron odiadas en su tiempo:
Una obra imprescindible de David Lynch que aún puede considerarse como indescifrable y que en su tiempo le fue peor debido a que el mundo no se había “acostumbrado” a la mente del cineasta. Incluso en estos días no es una película para todos aunque para los seguidores del séptimo arte es como hablar de algo sagrado; no obstante, su ópera prima, que fue producida por el Instituto Americano de Cine mientras estudiaba ahí, fue peor recibida y fue descrita como un “ejercicio repugnante de mal gusto”, debido a las extrañas imágenes en blanco y negro que incluyó el director en su propuesta.
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Una de las más grandes reivindicaciones en esta lista pertenece a la película protagonizada por Megan Fox. Ahora considerada un clásico de culto moderno, e incluso el ícono feminista que fue desde el principio, esta historia fue rechazada por años desde su propio lanzamiento, en parte debido a que la campaña de marketing alrededor de ella la vendió como un producto diferente. En cuanto el público se dio cuenta que había mucho por disfrutar del relato sobre una estudiante poseída, con brillantes diálogos, representación queer, y la genial dupla actoral de Fox con Amanda Seyfried bajo la dirección de Karyn Kusama, la recepción de este filme se volvió considerablemente positiva.
No faltó el caos a raíz del estreno de El Club de la Pelea. Es ampliamente conocido el hecho de que esta película dividió a la audiencia y eso tuvo influencia en su desempeño en la taquilla. Este relato fue muy oscuro como para alcanzar a una amplia audiencia y no ayudó el hecho de que la crítica la destrozó de inmediato. Sin embargo, cuando salió en formato físico se convirtió en un éxito que vendió más de 6 millones de copias, seguramente porque muchas personas decidieron darle una segunda oportunidad.
Es muy sencillo imaginar cuán negativa fue la reacción de quienes vieron La Masacre de Texas original en los años 70. Ahora es considerada un clásico, mientras que en su tiempo recibió muchas objeciones supuestamente por el exceso de sangre. Lo curioso es que aunque sí hay uno que otro momento grotesco, lo que menos tiene es salpicaduras de sangre. La cinta de Tobe Hooper sorprende por su ausencia de sangre, y es que el director esperaba que al limitar esto su proyecto pudiera obtener una clasificación PG, que igual no sucedió. Tal vez un asesino con una sierra eléctrica fue suficiente para despertar los peores temores de la gente al punto de que no se fijaron bien en lo que ocurría en la pantalla…
Las precuelas de Star Wars
Podríamos haber mencionado, tal vez, un par de las entregas de Star Wars que llegaron a cines a finales de los 90 y principios de la siguiente década, pero la verdad es que este conjunto de películas tuvo el mismo desafortunado destino al convertirse en historias que fueron odiadas en su tiempo. Star Wars: Episodio I - La Amenaza Fantasma - 55%, Star Wars: Episodio II - El ataque de los clones - 66% y Star Wars: Episodio III - La Venganza de los Sith - 79% tienen en común que el público prácticamente las desterró del universo al que pertenecen por años. Varios de sus personajes, la dirección que tomaron las cintas y otros detalles más fueron objeto de burlas que en años recientes han disminuido considerablemente. Tal vez porque un clavo saca otro clavo, y los fans encontraron víctimas nuevas en las secuelas de Disney, aunque de cualquier manera es ahora cuando están siendo vistas con cariño y sus actores están siendo idolatrados.
Es algo comprensible por qué una película como esta habría sido odiada al principio. Ahora considerada como un clásico del cine de terror, admirada por una mayor cantidad de gente que en los años 60, esta cinta francesa que contiene una historia de mucha intriga y cirugía plástica dejó a los espectadores sin saber qué decir. La respuesta a la película fue de confusión y asombro, pero tuvieron que pasar algunos años para que pueda ser apreciada. Eso no quita el hecho de que en su tiempo fue completamente innovadora para el séptimo arte.
Se convirtió en un clásico de Alfred Hitchcock por derecho propio, pero no podemos negar que también ganó fama por las reacciones legendarias de los espectadores. Gracias al crítico J. Hoberman, quien estuvo presente en ese momento, sabemos que el público pasó por una “montaña rusa” viendo Psicosis (vía Slash Film). Se habló de caos, una mezcla de gritos y risas, hasta de gente que intentó salir de la sala y algunos desmayos. Se dice que incluso eclipsó la campaña presidencial, y las provocaciones de la película no fueron bien vistas en ese entonces.
Para que sea la única película de esta lista, y en realidad a nivel general, que se ha ganado el título de “la peor película jamás realizada”, es porque algo de razón debe existir en ese título. The Room fue un atroz melodrama que costó alrededor de US$6 millones y nadie lo vio; bueno, tal vez los involucrados en él y sus conocidos ya que apenas recaudó US$1,800. Tuvieron que pasar algunos años y una película basada en su horrible experiencia de realización (The Disaster Artist: Obra Maestra - 94%) para que consiguiera un mayor aprecio del que obtuvo desde el primer minuto de su existencia.
Troll 2
Hablando de películas tan malas que al final resultaron buenas, encontramos el caso de Troll 2, no la animada, sino la cinta italiana de terror que se estrenó en 1990. Se filmó en inglés, y aunque cueste creer que hay algo peor que The Room, esta recibió el título de “la peor película jamás realizada”. Le tomó algo de tiempo, pero algunos espectadores encontraron algo de encanto en el humor de la historia de una familia aterrorizada por duendes que los convierte en plantas para comérselos. De hecho, se habla de su creciente popularidad con el paso de los años en un documental llamado Best Worst Movie.
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