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Inventando a Anna - 77% se convirtió en una de las series más exitosas de Netflix este febrero y las conversaciones a su alrededor se mantienen activas en redes sociales, con varias de ellas enalteciendo a la verdadera Anna Sorokin por su meta de ser una mujer rica, poderosa e influyente. Ahora, durante una reciente entrevista con Vanity Fair, una de las antiguas amigas de la famosa estafadora declara que la serie invita a sentir empatía por su protagonista, algo que no le parece correcto, de hecho, lo juzga como peligroso.

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Sorokin, alemana nacida en Rusia, se estableció en Nueva York hace pocos años, llegando sin dinero, familia ni contactos pero con un objetivo claro: ser toda una socialité con base en engaños y robos. Adquirió el nombre de Anna Delvey y gracias a su carisma y poder de persuasión fue capaz de mezclarse con la élite de la ciudad, mintiendo y timando a las personas de su alrededor, haciéndose con millones de dólares por la vía ilegal, viviendo en hoteles caros y acudiendo a eventos de corte exclusivo.

Por supuesto que la mentira de Sorokin no duró demasiado y en 2017 fue exhibida, arrestada y entregada a las autoridades. Rachel Williams, antigua periodista de Vanity Fair y examiga de Anna que contribuyó con la policía para su arresto, habló con el medio sobre lo dañina que es la representación de la ladrona en la serie de Netflix:

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Creo que promover toda esta narrativa y celebrar a una criminal sociópata, narcisista y probada, está mal. Habiendo tenido un asiento de primera fila en [el circo de Anna] durante demasiado tiempo, he estudiado la forma en que funciona una estafa más de lo que nadie necesita. Ves el espectáculo, pero no prestas atención a lo que se comercializa.

Cabe mencionar que durante los años de Anna como socialité neoyorquina, invitó a Rachel y a otros amigos a un viaje a Marruecos, sin embargo, fue Williams la que terminó pagando todos los costos. Sorokin prometió que le devolvería todo con una transferencia bancaria, pero movimiento jamás lo hizo. Aquí el resto de las declaraciones:

Esta historia es completamente cierta, excepto por todas las partes que no lo son. Creo que vale la pena explorar en qué punto una verdad a medias es más peligrosa que una mentira. Ese descargo de responsabilidad da a la serie suficiente credibilidad para que la gente pueda creer [los elementos ficticios] más fácilmente. Creo que ese es un territorio realmente peligroso. Además, afectó los procedimientos de justicia penal en tiempo real.

Mediante entrevistas se ha comprobado que Anna Sorokin es una mujer bastante interesada en los bienes materiales, completamente entregada a la ropa de diseñador, el lujo y el dinero en general. Netflix le pagó US $320 mil por contar su historia a través de una serie, pero a grandes rasgos, ha utilizado el dinero para saldar sus deudas con la ley, y parece que todavía no puede tener la vida de abundancia con la que tanto sueña. Aunque ya habría tenido que ser deportada, Anna permanece en Estados Unidos.

Inventando a Anna es protagonizada por Julia Garner. La miniserie tiene nueve capítulos y fue producida por Shonda Rhimes, la destacada figura de la televisión que se ha encargado de otros grandes éxitos como La Anatomía de Grey o Bridgerton - 92%, esta última también lanzada en Netflix

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