Tomatazos

Actualmente la mayoría está de acuerdo en que Keanu Reeves (John Wick 2: Un Nuevo Día para Matar - 89%, Idaho: El Camino de Mis Sueños - 82%, Matrix - 87%) es uno de los actores más queridos de Hollywood; su participación en franquicias exitosas como Matrix y John Wick son solo una razón de su enorme fama, una gran parte de ésta se la debe a las historias que hay sobre su nobleza y gran corazón. A menos que seamos completamente incrédulos, está claro que esas historias son reales y el actor realmente es así; para confirmarlo ahora se suma Octavia Spencer (La Forma Del Agua - 92%, Talentos Ocultos - 92%, Unidos - 84%).

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La actriz de 48 comenzó su carrera de actriz trabajando en un papel secundario en Tiempo de Matar - 67%; después tuvo apariciones en la televisión, en series como ER (1998), Chicago Hope (1999), Los Expedientes Secretos X (1999) y Malcolm el de en medio (2000), entre otras. El personaje que le valió fama y reconocimiento internacional fue el de Minny Jackson, de Historias Cruzadas - 76%, gracias al cual ganó en la categoría Mejor Actriz de Reparto en los Premios Óscar, Premios BAFTA, Globos de Oro y en los Premios del Sindicato de Actores. Después de ese logro en su carrera, se le abrieron las puertas a nuevas y grandiosas oportunidades.

Cuando Matrix era un fenómeno mundial Spencer todavía estaba lejos de ser una figura importante en Hollywood, pero Keanu Reeves era el actor del momento. No obstante, desde aquellos días el también protagonista de Constantine - 46% era una persona amable y libre de la arrogancia que caracteriza a las estrellas de Hollywood promedio. Durante la reciente aparición de Spencer en el show de Graham Norton, la actriz contó cómo Reeves la ayudó en un momento de necesidad (vía Movie Web):

Hace unos 25 años, Matrix acababa de estrenarse. Iba de camino a recoger un guión para leerlo para una audición. Así que realmente no estaba usando ropa interior, estaba usando pantalones y mi camiseta favorita de fútbol americano universitario. Estaba gastada, era transparente. Y mi coche no había sido lavado porque siempre aparcaba debajo de los árboles, y había caca de pájaros por toda la parte trasera. Y se averió en esta zona fifí de Beverly Hills, y había un café y toda esta gente estaba sentada y los coches pitaban. Nadie me ayudaba.

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El recuerdo sin duda es sincero, pero la fecha que menciona no es precisa, pues la primera entrega de Matrix llegó en 1999, así que este año cumplió 21 años apenas. La actriz continuó su relato:

De repente, aparece un sujeto con gafas de sol y su casco de motociclista, y supe de inmediato que era Keanu Reeves. Y yo, por supuesto, me estaba volviendo loca. Y yo dije: 'Claro'. Entonces pensé que iba a entrar en el auto, me puse detrás del auto para empujar. Él dijo: 'No, te voy a empujar fuera de la calle, tú súbete'. Así que me empujó y luego, por supuesto, cuando la gente vio que Keanu Reeves estaba ayudándome, todos vinieron a ayudar.

En más de una ocasión el actor ha expresado que no deja que la fama se le suba a la cabeza, pues la actuación le sirve para dar sentido a su vida pero no para sentirse por encima de los demás.

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Dado que el sistema nos ha enseñado a admirar a las personas por su éxito profesional, entendido como riqueza económica, es de aplaudir que Reeves sea admirado por ser un buen tipo que lleva a cabo acciones pequeñas que hacen la diferencia. Un país tan racista y clasista como Estados Unidos no necesita más personajes como Harvey Weinstein, sino seres humanos empáticos para construir un mundo más justo para todos. A Reeves lo veremos próximamente en Matrix Resurrecciones - 65%, y en la cuarta y quinta entrega de John Wick, que serán rodadas el próximo año.