El tercer día de actividades en el festival de cine de Berlín tuvo distintas ocurrencias que comentar. Entre lo más sonado se encuentra la flexibilidad que tendrá el mercado Chino, uno de los más grandes del mundo, para con la cantidad de cintas extranjeras que se podrán exhibir en sus fronteras. Esto luego de firmar un nuevo acuerdo con Estados Unidos, lo cual ha hecho que varios productores y jefes de estudios europeos se encuentra precavidamente optimistas al respecto. Todos quieren un pedazo del pastel chino, pero el gobierno de aquel país lo resguarda celosamente.
Primera impresión: Final Portrait
Geoffery Rush protagoniza Final Portrait, una biopic que retrata un par de semanas clave en la vida del pintor y escultor suizo Alberto Giacometti y su misión de hacer un retrato de un amigo suyo crítico de arte. Para Owen Gleiberman en su crítica en Variety la cinta, dirigida por Stanley Tucci, es ambiciosa en sus intenciones.
La trama gira entorno a la relación de estos dos personajes y la búsqueda de Giacometti por encontrar una verdad en el lienzo que se encuentra escondida ante el ojo promedio. El cuadro se convierte en una obsesión en la cual se involucra por completo el artista.
IFC Films compra los derechos de Death of Stalin
Death of Stalin fue un proyecto con mucha demanda entre distintas productoras que buscaban asegurar tenerla en su menú fílmico. La cinta es una acida mirada al caos surgido alrededor de la muerte del dictador y genocida Joseph Stalin, situación que arrojó a la Unión Soviética al caos total, todo esto visto desde una perspectiva humorística.
Armando Iannucci escribe y dirige está sátira política muy al estilo de su anterior trabajo In the Loop, la cual se mofaba de las torpezas diplomáticas entre el Reino Unido y Estados Unidos. Los derechos de Death of Stalin fueron peleados ferozmente hasta que la compañía IFC Films logró asegurarlos en su bolsillo. El reparto incluye a Steve Buscemi, Rupert Friend y Jason Isaacs. El guion es la adaptación de una novela gráfica francesa, que a su vez se inspiró en acontecimientos reales.
Primera impresión: Wild Mouse
El comediante Josef Hader escribe y dirige Wild Mouse, un hibrido de drama y comedia sobre la crisis de la mediana edad de un crítico musical que es despedido del periódico donde trabaja. Para Variety Jay Waissberg se muestra poco impresionado con la cinta, la cual describe como un esfuerzo competente que difícilmente hare eco fuera del territorio europeo.
Luego de un inicio prometedor la película crea expectativas que nunca logra cumplir. Los puntos que el realizador trata de hacer sobre la sociedad aburguesada y su frivolidad nunca logran conectar. El humor está basado en picar el ego de los personajes pero eventualmente nos cuestionamos por qué tenemos que aguantar a estos avatares.
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