Tomatazos

Este jueves 8 de septiembre, la reina Isabel II de Inglaterra falleció a la edad de 96 años en su residencia de Balmoral, Escocia, confirmó el Palacio de Buckingham a través de medios oficiales. Ciertamente, la partida de la Reina Isabel, una de las monarcas más longevas de la historia y con 70 años al frente de la corona británica, tomó por sorpresa al mundo la mañana del día de ayer, provocando un caos mediático incomparable.

Por si te lo perdiste: Fallece la reina Isabel II de Reino Unido a los 96 años de edad

El 24 de junio de 2014, la reina Isabel de Gran Bretaña visitó el set de la exitosa serie de HBO Game of Thrones - 83%. La monarca, que superaba por mucho en edad a todos los gobernantes en los Siete Reinos de los libros de George George R.R. Martin , se reunió con los productores y el elenco del programa, y durante su recorrido, se negó a sentarse en el legendario Trono de Hierro.

Tal vez podrías llegar a pensar que la reina no era fanática de la serie y que por esto rechazó la fantástica oportunidad de tomar asiento en el mítico Trono. Sin embargo, dicha suposición está bastante alejada de la verdad, ya que la monarca simplemente declinó la oferta de sentarse porque no le era permitido. Puede llegar a sonar algo extraño, puesto que se trataba de una poderosa soberana, no obstante, existe una razón sólida que justifica su proceder.

También te puede interesar: Glass Onion: un misterio de Entre Navajas y Secretos presenta su primer tráiler

De acuerdo con un reporte de We Are The Mighty, los showrunners de la serie, David Benioff y Dan Weiss, y los miembros del reparto presentes durante la visita de Isabel II, Lena Headey (Cersei Lannister), Kit Harington (Jon Snow), Maisie Williams (Arya Stark) y Sophie Turner (Sansa Stark), quedaron sorprendidos cuando la reina se negó a tomar asiento en el famoso Trono.

Según la información, la reina de Inglaterra no puede “simplemente sentarse en el trono que ella quiera” por una vieja tradición que prohíbe que el monarca inglés reinante se siente en un trono extranjero. Si bien esta no es una ley real, es una práctica que se ha llevado a cabo desde tiempos antiguos. Aún cuando la posición de la reina y la familia real se ha conservado por mera tradición en la actualidad, un rey o una reina podrían llegar a ejercer el poder del estado, y sentarse en el trono podría considerarse un acto de agresión.

Ahora, ha quedado claro que durante su visita al set del programa, la reina tuvo que rechazar sentarse en el Trono de Hierro para mantener la vieja tradición intacta, aunque tal vez por dentro deseaba con toda su alma aceptar la oferta. En aquel entonces, Game of Thrones se encontraba transmitiendo su cuarta temporada, justo a medio camino de la historia que atrapó a millones de espectadores.

Actualmente, aunque muchos fans opinan que el final del programa fue bastante malo, la serie es recordada como una de las mejores de la historia. Gracias al descomunal éxito de GOT, llegó la precuela centrada en la Casa Targaryen, La casa del dragón - 91%, a HBO Max, la cual ya ha dejado encantada a la audiencia con tan sólo 3 episodios lanzados.

No te vayas sin leer: La Casa del Dragón: fans descubren un error tan vergonzoso como el del vaso de Starbucks