Tomatazos

Will Poulter es uno de esos nombres que no todos conocen, pero una vez que notan es difícil perder de vista. El actor rápidamente dio un paso importante gracias a su trabajo en Las Crónicas de Narnia: La Travesía del Viajero del Alba - 50%, donde él fue uno de los aspectos que más llamó la atención de los críticos. Con los años ha trabajado en varios géneros e interpretado a todo tipo de personajes, desde torpes y amables hasta villanos y narcisistas, convirtiéndose en un verdadero talento del que hay que tomar nota. Desde esta posición, el actor criticó la actuación de método y cómo ha servido para que varios artistas se salgan con la suya al abusar de otros.

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La actuación de método o del método es un estilo específico que nació en el teatro y sus estudios de personaje. La idea es que el actor se convierta en lo posible en el personaje que debe interpretar, pero esto va más allá del aspecto físico, pues la psicología del mismo es indispensable para conocer sus emociones y motivaciones, y hacer de manera realista sus reacciones frente al mundo narrativo en el que vive. Se trata de un compromiso que no cualquiera puede cumplir, en especial porque se debe vivir así durante toda la filmación, incluso después de que las cámaras dejen de rodar en el día.

Marlon Brando, Daniel Day-Lewis, Jared Leto, Christian Bale y Tom Hardy son sólo algunos de los nombres que más se repiten cuando hablamos del método, pero también cuando hablamos de momentos en los que se llegó demasiado lejos. Algunos actores como Andrew Garfield, Natalie Portman, Margot Robbie o Matt Damon fueron entrenados en esta forma, pero usualmente son capaces de separarse del personaje una vez que vuelven a casa, con contadas excepciones en las que se involucran demasiado y les cuesta volver a su realidad.

El gran problema de la actuación de método es, en realidad, un problema doble. Por un lado, el actor pierde demasiado el piso y hasta puede sufrir secuelas psicológicas al cruzar líneas emocionales o morales. En otras palabras, su trabajo termina por borrar a la persona real del mapa. Por el otro lado está el cómo actúan frente a otros y lo que pueden provocarles. Jared Leto mandó una rata viva a Robbie y un montón de condones y juguetes sexuales al resto del elenco de Escuadrón Suicida - 25%, mientras que Dustin Hoffman realmente golpeó a Meryl Streep durante la filmación de Kramer vs. Kramer - 88% en un intento por llevarla al límite.

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Algunos críticos y analistas consideran que el método no es tan funcional como alguna vez se pensó y deben manejarse líneas más claras para no promover el abuso dentro de una producción y para que el actor en cuestión no quede afectado de por vida. Hace poco, Mads Mikkelsen criticó abiertamente a aquellos que siguen este estilo y dijo que le parecía ridículo y pretencioso, y ahora Will Poulter da su opinión al respecto. En entrevista con The Independent (vía MovieWeb.com) el protagonista de Detroit: Zona de Conflicto - 94% aseguró que la preparación de un personaje no debe dejar espacio para el abuso de un colega:

Cuando se trata del proceso de un actor, sea el que sea, siempre y cuando no invada a otras personas y seas considerado, entonces está bien. Pero si tu proceso crea un ambiente inhóspito, entonces para mí has perdido de vista lo que es importante. La actuación de método no debería usarse como una excusa para el comportamiento inapropiado, y definitivamente lo ha sido.

Lo que explica Will Poulter definitivamente debe ser tomado en cuenta, en especial ahora que se analiza cada fracción de una producción para evitar casos de abuso de cualquier tipo.

Cada actor usa sus recursos para acercarse a un personaje. Michael Shannon, por ejemplo, no va al límite del método pero sí se prepara para abordar al personaje, leyendo e investigando, y averiguando qué es lo que quiere el director. De esta manera, para cuando está frente a la cámara es capaz de desaparecer en el personaje y la historia sin poner en riesgo su salud mental. Algunos más sólo exageran con el método cuando es un trabajo muy difícil, como Benedict Cumberbatch en El poder del perro - 98%, donde mantuvo su acento, aprendió a vivir como el protagonista y no se bañó por mucho tiempo. Cada actor debe encontrar la mejor forma de trabajar, pero nunca a expensas de sus colegas o haciendo más complicada una producción.

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