Tomatazos

James Bond es uno de los personajes más populares en el cine, y uno que hace competir a los actores que desean quedarse con el papel. Cuando se anunció hace años que Daniel Craig sería el encargado de una nueva franquicia el público no sabía muy bien qué pensar. Algunos no recibieron la noticia con agrado, aunque reconocían que el actor tenía una gran trayectoria; mientras que otros creían que él representaría un renacimiento para el agente. 007: Casino Royale - 95% marcó el camino y propuso la idea de renovar al espía para adaptarlo a las películas de acción actuales que ya permiten un mejor desarrollo de personajes.

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El problema vino con el estreno de 007 Quantum - 64%, pues esta secuela parecía tirar por la borda todo el esfuerzo anterior y dejarnos con una historia que se sentía mal contada, mal editada y sin mucha alma. Sin embargo, 007 Operación Skyfall - 93% y 007 Spectre - 65% volvieron a encantar a los fans quienes se preguntan qué salió mal con la segunda entrega. Ahora que Craig se despide de James Bond con Sin tiempo para morir - 83%, el actor reflexiona sobre su paso por esta franquicia y las cosas que pudieron mejorar o los puntos que terminaron por obstaculizar las propuestas iniciales para esta historia.

007 Quantum mostraba las consecuencias emocionales en Bond por la traición de Vesper, interpretada en la primera cinta por Eva Green. El agente descubre que las acciones de la mujer que amaba no fueron tan arbitrarias como él creía y que una peligrosa agencia manejaba los hilos desde el principio. La película fue dirigida por Marc Forster, más conocido por Descubriendo El País De Nunca Jamás - 83%, Cometas en el Cielo y Guerra Mundial Z - 67%, y escrita por Paul Haggis, guionista de Golpes del Destino - 91% y Alto impacto - 75%. La mezcla de estos dos nombres prometía un proyecto serio, donde la acción fuera un recurso y no el eje narrativo, pero el resultado fue desigual.

En el documental Being James Bond (vía Collider) Daniel Craig habló sobre la decepción que significó 007 Quantum. Para empezar, el actor admite que se sintió muy presionado después del éxito que tuvo 007: Casino Royale, y considera que la secuela sufrió el clásico problema del “segundo disco”, donde el producto no puede mejorar la primera entrega, y los fans y los críticos no perdonan ningún error. Además, la industria misma estaba sufriendo y eso afectó la producción:

Tuvimos una huelga de escritores. Teníamos un guión; no estaba terminado, pero estaba casi terminado. La película más o menos funciona. No es Casino Royale, y eso siempre iba a ser…era como, literalmente, el síndrome del segundo álbum. De cierta manera, nunca íbamos a igualar a Casino…es fácil decir eso. Por supuesto, queríamos igualar a Casino Royale, pero…ya sabes.

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Los productores Michael G. Wilson y Barbara Broccoli confirmaron que no tenían un guión y que, peor aún, no tenían un escritor que ayudara con las correcciones. Broccoli explica:

Básicamente comenzamos a filmar sin un guión, lo cual nunca es una buena idea. Pero el guión fue entregado, y recuerdo que el escritor que entregó el libreto recogió su cheque, y luego recogió su cartel y se paró afuera del estudio en la huelga. Estábamos algo jodidos, y todos tuvimos que meternos de lleno y tratar de hacer funcionar la historia, y realmente no estaba funcionando tan bien. Pero miro la película y, ya sabes, sigue siendo una buena película.

En 2016, durante una entrevista con Collider, el propio Marc Forster reveló que al ver todo el problema con el guión estaba decidido a retirarse del proyecto, pero lo convencieron de quedarse porque no esperaban que la huelga durara tanto, y asumieron que podían reparar el daño durante la filmación. Sin embargo, el director no se arrepiente de haberla hecho y considera que no quedó tan mal y está satisfecho con el corte final.

En un intento por compensar el problema, Daniel Craig decidió arriesgarse e involucrarse en todos los aspectos posibles. Para empezar, el actor hizo todos los stunts que pudo, lo cual terminó siendo un aspecto negativo porque terminó muy lastimado. Por otro lado, se unió al director para tratar de arreglar algunos asuntos del guión, aunque admite que él no es escritor así que sólo podía aportar algunas ideas. A pesar de estos problemas, Craig recuerda con cariño 007 Quantum y es de resaltar que la película, también protagonizada por Olga Kurylenko y Gemma Arterton, fue un gran éxito en la taquilla mundial, lo cual aseguró la llegada de más entregas.

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