Tomatazos

En estos tiempos de contingencia por la aparición de Covid-19 todos hemos resultado afectados, incluyendo a la industria del cine. Las grandes cadenas se vieron en la necesidad de cerrar sus puertas a nivel nacional, y los mismos pasos siguieron otras iniciativas privadas. Ante la situación desesperada de cuatro cines comunitarios, Yalitza Aparicio ha decidido contribuir con donaciones para que no pierdan la oportunidad de seguir operando y llevando el séptimo arte a las mentes y corazones de las personas.

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Yalitza Aparicio saltó a la fama internacional en 2018 gracias a su intervención en Roma - 99% de Alfonso Cuarón (Y Tu Mamá También - 92%, La Princesita - 97%, Gravedad - 96%) y desde entonces se ha convertido en una prominente figura que lucha por las causas sociales. Aparicio fue nombrada Embajadora de la Buena Voluntad por parte de la UNESCO en octubre del año pasado, y se ha sumado a numerosas luchas altruistas en el territorio nacional, abogando por los derechos de las mujeres y más.

A través de su perfil en Twitter, la actriz se 26 años anunció su contribución a la iniciativa “Ayuda a que las pantallas sigan brillando”, un esfuerzo iniciado en la plataforma de Donadora en el que cuatro cines comunitarios piden apoyo para cubrir con sus gastos en este tiempo complicado. Se trata de Cine la Mina, CineToo, NAYAR LABCinema y El Cine Club, ubicados en Guanajuato, Oaxaca, Nayarit y Quintana Roo, respectivamente. Aquí la publicación:

Acabo de donar a este hermoso proyecto, invito a que se sume quien también esté en posibilidades de hacerlo.
Échenle un ojo, todavía pueden apoyar a los niños, a la cultura y a estos espacios que la difunden.https://t.co/iQTKMu5Am8 https://t.co/OBs2hEYuF8

— Yalitza Aparicio Martínez (@YalitzaAparicio) June 15, 2020

El proyecto anunciado en Donadora incluye las historias de cada cine, sus objetivos y el papel que han venido desarrollando durante sus años de funcionamiento; son complejos relativamente recientes que han encontrado un espacio entre el público y que luchan por mantenerse vigentes en una época donde el contacto social que exigen las salas de cine se ve amenazado. A mediados de marzo cerraron sus puertas antes la llegada del Covid-19 pero se mantienen con la frente en alto. Aquí algunos fragmentos sobre la descripción del proyecto:

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Creemos en la potencia social del cine y en su poder como agente educativo. Cada uno de estos proyectos genera actividades de formación audiovisual, beneficiando a las comunidades locales, incluyendo a niños y jóvenes. En conjunto, tan solo en 2019, exhibimos 2,476 funciones, apoyando el cine que queda fuera de la exhibición comercial, del cual más del 30% fue cine mexicano, y llevándolo a 25,660 espectadores de localidades con poca oferta cultural.

El proyecto también busca apoyar al equipo de trabajo cuyos gastos dependen de la apertura y supervivencia de estos cines:

Queremos que nuestras pantallas sigan brillando; por eso, lanzamos esta campaña para recaudar los fondos mínimos para cubrir los gastos básicos de estos cuatro proyectos por 3 meses. Gastos como renta, servicios, y sobre todo, los sueldos de alrededor de 16 colaboradores (baristas, meseros, staff, cocineros, proyeccionistas, diseñadores, programadores, gestores, contadores) auxiliando también a sus familias en este momento tan complicado.

Hasta el momento, 504 personas han donado a la causa y mañana es el último día. Por fortuna, la meta ha sido superado: el monto a lograr era de 264 mil pesos mexicanos y en estos momentos ya tiene $273,849 mil pesos. Es un gusto saber que el proyecto alcanzó su objetivo y que Cine la Mina, CineToo, NAYAR LABCinema y El Cine Club seguirá funcionando como salas independientes, llevando el cine a sus respectivos lugares. Puedes donar aquí.

Algunas sucursales pertenecientes a cadenas de talla nacional ya han abierto sus puertas al público, sin embargo, la afluencia es poca. La enfermedad sigue muy presente y las personas no quieren correr riesgos de contagio asistiendo a los complejos. Pasará un largo tiempo hasta que los cines logren funcionar tal y como antes lo hacían.

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