Tomatazos

Shannen Doherty es bastante conocida por la generación de la década de los 90, quienes crecimos viéndola en series como Beverly Hills,90210 junto a Jennie Garth, Tori Spelling y el fallecido Luke Perry. También se le recuerda gracias a su participación en Hechiceras, siendo la más grande de las hermanas brujas quienes eran interpretadas por Holly Marie Combs y Alyssa Milano. Ahora, quien fuera Prue en el marco de esta producción, reveló que se encuentra en la etapa 4 de cáncer, y confesó que se siente aterrorizada por dicha enfermedad.

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Doherty se enteró del diagnóstico de esta etapa avanzada antes de aceptar regresar en el reboot de la serie Beverly Hills, 90210 que se anunció el año pasado. Así que, debido a que sabía que la información sobre su estado de salud saldría a la luz tarde o temprano decidió ser ella quien diera la noticia, por lo que ofreció una entrevista a Good Morning America donde se abrió completamente sobre cómo se siente en cuanto a la enfermedad:

Se iba a saber en cuestión de días o una semana que estoy en la cuarta etapa. Mi cáncer volvió. Y es por eso que estoy aquí. No creo que lo haya procesado. Es una píldora amarga de tragar de muchas maneras. Estoy petrificada. Estoy bastante asustada. Mi madre es un ser humano fuerte y valiente. También mi esposo, pero me preocupo por él.

La famosa actriz de la década de los años 90 se enteró de que tenía cáncer en 2015, así que a manera de catarsis y de solidarizarse con los pacientes que sufren de esta enfermedad, fue documentando cada momento a través de sus redes sociales. Pero, en cuanto supo lo de la etapa 4 y que el cáncer había regresado decidió guardar silencio y regresar al reboot de la serie que la catapultó a la fama y demostrar que a pesar de su estado de salud podía seguir trabajando:

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Una de las razones del por qué volví a '90210' y realmente no se lo conté a nadie es porque pensé que la gente puede ver que otras personas con la etapa cuatro también pueden trabajar. Como ya sabes, nuestra vida no termina en el momento en que recibimos ese diagnóstico. Todavía tenemos algo de vida que hacer

Shannen además habló del impacto que causó en ella el saber que tenía una etapa muy avanzada de cáncer en marzo y que se empalmara con la repentina muerte de su coprotagonista Luke Perry, ya que él se veía en un estado de completa salud y termino por fallecer:

Es muy extraño para mí ser diagnosticada y que alguien aparentemente tan saludable como él se marche primero. Fue realmente impactante. Lo menos que podía hacer para honrarlo era hacer era regresar al programa.

A pesar de guardar silencio, le confió su situación a un grupo pequeño de allegados, entre ellos el actor, Brian Austin Green, uno de sus coprotagonistas de 90210, quien fue clave para superar los extenuantes días de filmación de 15-16 horas en el set:

Tuve momentos de gran ansiedad en los que pensé: 'Realmente no puedo hacer esto'… y Brian antes de filmar, él siempre me llamaba y me decía: 'Escucha, sabes, pase lo que pase, te apoyo'. Me miraba y decía: ‘Lo lograremos, pequeña' ... así que Brian me ayudó mucho.

La actriz además enfatizó en el hecho de que quería que el público y sus seguidores se enteraran por ella, controlar la narrativa y la forma en que se comunicaba, sin hacer un documental o un reality show, quería que esta noticia fuera real y auténtica.

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