Tomatazos

En 1999, la popular telenovela colombiana Betty, la fea conquistó a los espectadores locales para después ganarse el corazón del público de más de 100 países en los que se transmitió (vía Colombia.com). Estos últimos meses, este material original de RCN Televisión ha vuelto a robarse la atención del público, gracias a que Netflix la agregó a su catálogo, sin embargo, a más de 20 años de sus estreno, críticos, espectadores y hasta los mismos actores han notado que la historia es machista y homofóbica (vía Extra).

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Betty, la fea fue escrita por Fernando Gaitán, quien falleció en enero del año pasado y trabajó como guionista y productor de telenovelas y series de televisión. La historia sigue al personaje de Beatriz Pinzón (Ana María Orozco), una joven brillante con un título en finanzas que es poco atractiva. Para su suerte, consigue empleo en una de las compañías más importantes en el mundo de la moda, Ecomoda.

A pesar de ser buena en su trabajo, Betty enfrentará constantes desprecios debido a su aspecto físico y para colmo se enamorará de su jefe, el recién nombrado presidente Armando Mendoza (Jorge Enrique Abello), quien se encuentra comprometido con la guapa Marcela Valencia (Natalia Ramírez), encargada del área de ventas.

Los ojos que vieron la novela a principios de los 2000 han cambiado y ahora el público que ha visto Betty, la fea ya no la considera tan cómica, ni tan ingeniosa como se pensaba que era. Críticos y espectadores han considerado que la historia está repleta de chistes machistas y homofóbicos, señal de que el mundo ha cambiado.

Si bien es cierto que la telenovela sigue siendo atractiva, pues ha tenido mucho éxito en Netflix, la realidad es que muchos se han percatado de diálogos misóginos que antes ni siquiera hubieran notado. Asimismo, la historia está basada sobre una premisa machista, en la que la mujer vale únicamente por su aspecto físico, que además, no tiene que gustarle a ella, sino al resto del mundo.

La periodista Michaella Changoluisa de Extra consultó a especialistas para entender el fenómeno de Betty, la fea y se dio cuenta que en el pasado los guiones de las telenovelas estaban basados en la realidad de la sociedad latinoamericana, pero también ayudaban a que se perpetuara el mismo machismo, la misoginia y la homofobia, pues replicaban los patrones sin cuestionarlos.

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Ahora, 20 años después del estreno de la popular producción colombiana, el público ha comenzado a cuestionar los comportamientos que muestran en la novela, así como la representación de los personajes femeninos y de los homosexuales. El mismo Jorge Enrique Abello, actor que le dio vida a Don Armando, reveló el año pasado, en el programa La Tele Letal (vía Perú21) que la historia de Betty, la fea era machista, misógina y homofóbica.

Hoy no se podría hacer algo así porque es sectario, hay homofobia, es machista profundamente, maltrata a la mujer y tiene todos los códigos de lo que hoy no se podría hacer.

Para la periodista Changoluisa el proceso para que las telenovelas se alejen de los roles establecidos será lento, sin embargo, el panorama es optimista, pues, poco a poco, los jóvenes se han dado cuenta de lo que falla en estas producciones, obligando a la industria del entretenimiento a crear películas, series y novelas que no repliquen comportamientos machistas y homofóbicos.

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