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El aporte del cineasta Rob Zombie a la decena de películas de Halloween - 94% se dió en dos ocasiones: la primera de ellas fue con el remake de 2007, con el nombre de la original de 1978, Halloween: El Inicio - 25%, y luego en 2009 con la secuela Halloween II (H2) - 19%.

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La opinión del público aún está dividida cuando se trata de examinar estas dos versiones de la película de culto. Las libertades que se tomó Rob Zombie para contar la historia de Michael Myers no dejaron indiferentes a los fans puesto que este director, cuyas ideas toman con valentía muchas cosas de las películas de la década de 1970 no fueron bien recibidas por todos.

Zombie se arriesgó al querer dar un giro a la personalidad y origen de Michael Myers. Mientras que la versión original de John Carpenter lo presentaba como un ser más unidimensional cuyo propósito en el filme era ser la encarnación del mal, en la del remake de 2007 se mostró un trasfondo muy humano donde descubrimos que Michael Myers debe su actitud homicida a factores como el maltrato infantil y una vida familiar muy conflictiva que lo llevaron a ser como lo conocemos.

En Halloween II (H2), el director tuvo mayor libertad y rompió esquemas al haber mostrado a Myers sin la famosa máscara y al haberlo matado a él y a Laurie Strode para el final de la película. A Zombie nunca le interesó llegar a hacer una tercera parte y considera que ese cierre fue lo que debió ser.

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En una entrevista con SFX Magazine (vía Bloody Disgusting), Rob Zombie afirma que su Halloween II (H2) es su contribución favorita. El cineasta afirma estar orgulloso de ambas películas, pero que aunque nos sorprenda, siempre tendrá un lugar especial para la segunda de ellas. Mencionó también que hacer un remake es algo difícil y que dar con la fórmula ganadora es casi imposible, debido a que los fans siempre van a querer lo mismo y cualquier giro podría ser causa de controversia.

Con Halloween: El Inicio se enfocó en quién era Michael Myers y en la segunda pudo jugar con otros factores como la exploración de los traumas de Laurie Strode luego de los sucesos de la primera; y admitió que está feliz de haber dejado su sello en la franquicia y que eso es lo único que en realidad le importa. Lo que diga el resto lo tiene sin cuidado, porque siempre va a haber quien diga que hubiera sido mejor si el director hacía esto o si dejaba de hacer lo otro.

Aunque su remake de 2007 fue un éxito en taquilla en su época y la segunda no tanto, lo cierto es que nadie puede negar que Rob Zombie tuvo el valor que requiere tomar la responsabilidad de devolver a la vida a un clásico de terror al que aportó su visión con éxito.

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