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Sex Education es una serie británica creada por Laurie Nunn para Netflix, que ha cautivado al público desde 2019, pero como todo lo bueno, ha llegado a su fin con la cuarta temporada. La crítica ha comenzado a publicar sus reseñas y hasta el momento parece que el show se retira con una calificación alta, aunque el corazón de los fans estará melancólico por las despedidas.

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La historia de Sex Education sigue a los estudiantes, el personal y los padres de la ficticia Moordale Secondary School, donde abordan diversos dilemas personales, frecuentemente relacionados con la intimidad sexual. La serie ha recibido elogios por su elenco, escritura, dirección, valores de producción y tratamiento maduro de sus temas, convirtiéndose en un éxito de audiencia.

Al inicio se presenta a Otis Milburn, interpretado por Asa Butterfield, un estudiante que comienza con ambivalencia hacia el sexo, en parte debido a su madre, Jean, interpretada por Gillian Anderson, que es terapeuta sexual. Otis, con la ayuda de Maeve (Emma Mackey), crea una clínica de terapia sexual para ayudar a los estudiantes con sus problemas sexuales. La serie también se adentra en la vida de otros estudiantes, explorando diversas aristas del crecimiento, la autoaceptación y el amor.

Hasta la tercera temporada, los personajes enfrentaron cambios significativos y crecimiento personal, adaptándose a nuevos entornos y relaciones, y nos dejó con el inicio de un nuevo año escolar, relaciones formándose, la expectativa de un bebé en el futuro cercano y una serie de complicaciones adicionales debido a las reformas de una nueva directora en Moordale.

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La cuarta y última temporada, estrenada el 21 de septiembre de 2023, trajo consigo un aire fresco y nuevas perspectivas, al mudarse a un nuevo colegio, el instituto Cavendish. Los nuevos episodios nos muestran un colegio que contrasta significativamente con Moordale, destacando por ser más moderno y progresista en pensamiento y enfoque. Los estudiantes y personajes principales se enfrentan a nuevos retos y situaciones, incluyendo a Otis, quien descubre que en Cavendish ya existe una terapeuta sexual, resultando en un rival profesional para él.

Con la incorporación de nuevos personajes, como 'O', interpretado por Thaddea Graham, la temporada explora nuevas dimensiones y perspectivas, incluyendo diferentes aristas de las personas trans y una estudiante sorda, añadiendo profundidad y diversidad al ya rico tapiz narrativo de la serie. Maeve, por otro lado, comienza una nueva etapa como universitaria en los Estados Unidos, donde enfrentará nuevos desafíos, incluyendo a un escritor interpretado por Dan Levy.

En palabras de Christina Tom, directora de arte del show, la creación del instituto Cavendish se centró en imaginar un lugar que respetara la diversidad y fuera abierto, tecnológicamente avanzado, y que mantuviera la esencia retro característica de la serie. Esta temporada también se enfrentó a retos en la grabación, adaptándose a los tiempos y disponibilidades del elenco, incluyendo a Dan Levy, quien se unió al proyecto para esta última entrega.

¿Cuál es la calificación de la cuarta temporada de Sex Education?

Hasta el momento en que este artículo es publicado, la cuarta temporada de Sex Education - 86% lleva un 90% de calificación de la crítica. A continuación pueden leer lo que están diciendo los críticos:

Jasmine Valentine en Dexerto:

El show es sorprendentemente acogedor y reconfortante de ver, incluso cuando se trata de lidiar con los abismos de la humanidad. El mundo y la construcción de personajes de las últimas 3 temporadas no se pierden en el nuevo entorno, incluso cuando los detalles pasan desapercibidos. Si bien es decepcionante despedirse definitivamente de Moordale, Sex Education ha elegido conscientemente dejar las cosas en el lugar más saludable posible, y ¿qué mejor mensaje para el programa que ese?

Lydia Venn en Cosmopolitan:

Como ocurre con cada temporada, Sex Education estuvo, por supuesto, llena de sexo. Sin embargo, a diferencia de temporadas anteriores, se sintió claramente diluido, ya que toda la serie adoptó un enfoque de centrarse en el viaje personal de cada individuo, lo que resultó en una manera verdaderamente perfecta de cerrar el programa que significó tanto para tanta gente.

Emily Garbutt en Games Radar:

La serie agrupa sus conflictos en un elegante lazo, con todos (en su mayoría) felices. Si bien debemos sonreír ante los valores saludables y no problemáticos de Cavendish, el final de temporada corre el riesgo de caer en ese mismo territorio. Además, como conclusión de una carrera de cuatro temporadas, fracasa un poco con tantos jugadores clave desaparecidos, desde el ex novio de Jean, Jakob (Mikael Persbrandt), hasta la estudiante favorita de los fanáticos, Lily (Tanya Reynolds). Si bien Sex Education nunca tuvo miedo de abordar de frente los problemas del mundo real, estos finales felices parecen artificiales. En verdad, la serie debería haber terminado con la temporada 3...

Alex Harrison en Screen Rant:

No es diferente a temporadas anteriores en términos de narración, y si bien muchas cosas están muy bien resumidas, no hay una necesidad abrumadora de concluir narrativamente estos episodios: la vida continuará para estos personajes más allá de nuestro tiempo con ellos. Pero hay una sensación de meditación sobre el mensaje y la misión del programa, como para expresar más resueltamente el significado detrás de todo. Representa algunos de los momentos más conmovedores de esta comedia dramática y confirma el legado de este programa como una expresión convincente del valor de la inclusión como espíritu.

Yasmine Kandil en Discussing Film:

Dejando a un lado los defectos, la cuarta temporada de Sex Education sigue siendo entretenida y prospera cuando se centra en el grupo principal de personajes con los que hemos estado creciendo durante casi media década. Esta salida final, en particular, es más conmovedora cuando explora el significado de las relaciones no románticas. Ya sea familia, amistad o incluso autodescubrimiento, cada relación externa e interna tiene sus complejidades y Sex Education nunca rehuye eso, ahondando en la belleza y las dificultades del ser humano.

Chase Hutchinson en Collider:

De principio a fin, Sex Education fue tan confusa como alegre y tan tonta como sincera; sin embargo, incluso con algunos obstáculos en el camino, encontró algo veraz en cada uno de sus personajes. En esta última temporada, se volvió trascendente. Adiós, chicos caóticamente cachondos, y mucha suerte. Fue agradable verlos crecer torpemente.

Shannon Connellan en Mashable:

Amigos, si pueden pasar el final de Sex Education sin llorar como un bebé en cada escena, los aplaudo. La serie se despide de sus personajes desde un lugar en el que realmente los conoce, por dentro y por fuera, y cuánto significan entre sí, para el público y para los actores que los interpretaron. Al valorar la conexión y el compañerismo, Sex Education defiende las segundas oportunidades, el perdón y la oportunidad de disculparte y cambiar tu comportamiento si arruinas las cosas. La serie ha crecido con sus personajes, a veces moviéndose hacia territorios más pesados, manteniendo su tontería, incomodidad y alegría.

Manuel Betancourt The A.V. Club:

En general, la cuarta temporada de Sex Education ofrece una lección final bienvenida para todos los involucrados y, en el proceso, hace una pequeña reverencia a las historias de todos. Lo cual no quiere decir que todos obtengan el final feliz que desearían. Pero hay una sensación de finalidad que cierra el círculo de los temas de inclusión, aceptación, amor propio y superación personal del programa. Y así, incluso cuando tropieza, especialmente en su comprensión casi opresiva del sexo y el deseo como algo innecesariamente vinculado a relaciones de pareja, la serie sigue siendo un momento decisivo en la forma en que fusionó entretenimiento y didactismo, dejando una huella como prueba de que sería mejor para todos hablar abierta y francamente sobre nuestros numerosos impulsos hormonales (sexuales y de otro tipo).

Matt Fowler en IGN:

Sex Education sigue siendo una de las comedias "vergonzosas" más importantes e inclusivas que jamás hayas visto durante su temporada de despedida, poniendo patas arriba los clichés adolescentes al ofrecer momentos escandalosos y luego explorando el verdadero significado detrás de ellos, incluidos los efectos del trauma. y represión. Incluso la nueva escuela aparentemente amigable es criticada por su opresiva positividad, de modo que no se trata solo de corregir la ignorancia. El extenso elenco sigue siendo un punto culminante encantador, capaz de manejar todo el material aquí, ya sea ridículo o sinceramente dramático.

Olly Richards en EMPIRE:

...es un final más que apropiado, que mezcla dulcemente la sincera positividad y el humor tonto del programa. Sex Education, que ha sido pionera en su representación y siempre ha visto la vida de su elenco joven con escrituras más maduras y mejores chistes que muchos programas "para adultos", se graduó con gran éxito. Esta temporada final es, a diferencia de muchas de las cosas que se viven a lo largo del programa, segura, satisfactoria y memorable por todas las razones correctas.

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