Tomatazos

El circuito de festivales anuales tiene espacio para todos los géneros, y esto es especialmente importante para los fanáticos del terror. El género produce muchísimas ofertas, pero la mayoría no llega, ni llegará, a cadenas comerciales porque todavía hay ciertos factores que influyen en estas decisiones, como la competencia en cartelera, las franquicias multimillonarias y la demanda del público. Hace años, el terror era considerado un género menor, pero poco a poco se le ha dado más reconocimiento gracias a los festivales especializados que buscan mostrar el verdadero panorama dentro de la industria. Macabro definitivamente es uno de los espacios más populares y respetados por los fans y los realizadores, y este año traerá varias sorpresas para celebrar su renacimiento tras la pandemia mundial.

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Luego de tener que enfrentar la pandemia mundial que paralizó a la industria desde las producciones hasta los estrenos, Macabro XXII buscará retomar los eventos presenciales para recordar al público que lo que realmente forma y da fuerza a esta comunidad es la interacción entre los fans y la posibilidad de acercarse a los creadores y artistas dedicados al género. Para celebrar la llegada de una nueva edición, Tomatazos tuvo la oportunidad de entrevistar a Edna Campos, directora y fundadora de Macabro, quien nos habló sobre los cambios en el festival, los nuevos retos que se presentan en este ámbito, cómo es recibir a una nueva generación de espectadores, y cómo percibe el panorama del terror en México.

El tema de Macabro XXII

Empezamos nuestra entrevista con Edna Campos hablando sobre el tema de esta edición de Macabro representado en el lema de “el renacimiento después del apocalipsis”:

Creo que hay varias cosas simbólicas para este año. Por ejemplo, son 22 años del festival, eso está hablando de que ya estamos tratando con una nueva generación. Está la generación que empezó yendo al festival, que de alguna manera, fueron quienes empezaron a conformar la comunidad de Macabro. Creo que todos somos de la misma y ya somos adultos que también tenemos que abrir paso a la nueva generación, a todas estas personas que nacieron en el 2000. La verdad es que ha sido interesante ver ya este cambio. Ver cómo la gente que habitualmente va al festival desde hace muchos años, algunos ya tienen hijos, pero eran chavitos cuando empezaron a ir al festival. Y también ver que se acerca gente y nos dice que ya puede venir al festival porque querían desde hace mucho, pero no eran mayores de edad, entonces no podían ver muchas de las películas que se programaban. Los chicos y las chicas que se han apuntado al voluntariado también son gente bien joven que quiere aprender cómo se hace un evento de este tipo, y que les gusta mucho el género. Eso creo que es uno de los puntos.

El otro es que, yo diría que estamos como en un puente en este momento. A nivel social y en todos los sentidos, hay un cambio de paradigma. Estamos viendo que muchas de las formas como trabajábamos antes, incluso el cómo se financiaban algunos proyectos culturales, han cambiado mucho. También la entrada del mundo digital con tanta fuerza, las redes sociales, el streaming, todo esto. Estamos en un puente entre lo que era lo tradicional, que era ir a la sala de cine, y el streaming, incluso los cambios que hemos visto a nivel de los formatos, que antes se trataba de que las películas pasaran en 35 mm aun cuando por ser cine independiente ni siquiera tenían eso, y ahora son formatos digitales los que se ven en las salas. También el tratar de compaginar, por un lado, esta parte tradicional con el mundo digital. Creo que también el festival está yendo hacia ese rumbo, y por eso es tan simbólico ese renacimiento después de este shock tan fuerte que fue la pandemia y que de alguna manera nos va a ayudar históricamente a marcar el antes y el después.

Hablamos también sobre cómo ha cambiado el panorama general de las visitas al cine. Vemos a diario que películas de gran presupuesto se quedan cortas en taquilla porque después de la pandemia el público ya es más selectivo al momento de ir y gastar su tiempo y dinero en salas comerciales por todas las ofertas en streaming. ¿Cómo trabaja Macabro este año para atraer nuevamente a su audiencia a eventos presenciales?:

El festival va 100% presencial. Incluso las charlas que vamos a tener y todos estos eventos especiales, todo va a ser presencial. Sí vamos a hacer el registro, por supuesto, pero no va a ser esta simultaneidad que se había estado manejando. Creo que de alguna manera los festivales de cine sí son eventos para ser presenciales, sé que hay algunos que son digitales o de cine por internet, pero en el caso de Macabro el espíritu es de comunidad, hay una idea de que la gente a la que le gusta el género se puede reunir en torno a los directores o directoras, en torno a los que organizamos el festival, entre ellos, gente que es muy conocida que le gusta el género que son especialistas que también asisten. Todos formamos esa comunidad y creo que eso hace la gran diferencia.

Es muy complicado hacer algo digital, incluso festivales con muchísimo más presupuesto que Macabro lo han intentado y realmente no pueden. Creo que todos preferimos estar en el lugar, y lo que sí creo que sucede es que todas estas herramientas digitales ayudan a complementar la oferta, pero no la sustituyen.

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La pandemia fue un reto muy difícil que cambió la forma en la que el público consume cine, pero Macabro sigue trabajando para que el público regrese a eventos presenciales a pesar de todo sin olvidar que estos cambios también son una evolución para su trabajo y herramientas que pueden servir a futuro:

Es algo que con la pandemia se disparó, creo que es algo que iba a suceder tarde o temprano. Este gran mercado que hay en el streaming en el que se generaron varias plataformas aparte de las que ya son muy conocidas. Creo que era el paso que se tenía que dar, y por ahí va este tema del renacimiento; hacia allá vamos, ahí es donde está gran parte del público. Hay mucha gente que dice “no voy al cine”. Yo sí los invito al cine, y después pueden ver las películas otra vez en streaming. Nosotros habíamos recibido muchos comentarios, preguntas, sobre por qué no estaba todo el festival en streaming. Es bien complejo, porque obviamente para todas las películas que pasan en Macabro se gestiona una licencia, y esa licencia puede ser de dos o tres pases de la película, nada más. Entonces, entendemos que el streaming es otra ventana distinta.

Durante la pandemia, al no tener la ventana de los cines tradicionales, los productores optaron para que las películas no se quedaran guardadas. Aceptaban que se vieran en streaming, no querían perder el momento, y pues es una inversión muy grande. Al volver a la normalidad, lo que pasó fue que regresaron a las ventanas tradicionales, aunque algunos estrenan en streaming poco después, pero prefieren el camino tradicional. De ahí que la oferta del festival para streaming fuera disminuyendo. Este año tenemos sólo tres largometrajes que estarán en streaming. Todos los cortometrajes, salvo un par que son estrenos mundiales, sí van a estar disponibles en FilminLatino.

Películas de Macabro en streaming

Siguiendo esta premisa, para esta edición, Macabro formó una alianza con CINDIE, servicio de streaming enfocado en el cine independiente en el que podremos encontrar varias de las ofertas:

Con CINDIE, justamente hicimos esta alianza comercial para empezar a ofertar de forma permanente varios de los títulos que han estado en Macabro. Creo que va a ser una gran oportunidad, siempre es un riesgo pero queremos que funcione; además, se va a ver en toda Latinoamérica, eso es interesante porque ya se gestionó de acuerdo a cómo funcionan las plataformas tradicionales. Es decir, no van a estar estas películas nada más durante el festival, se quedan como parte del catálogo de la plataforma y estarán disponibles a través de canal de CINDIE Macabro. Es una de las muchas ramificaciones que ha tenido el festival en su historia, algunas permanecen, otras se fueron, pero lo que me interesa es que el festival está vivo.

Macabro sigue siendo uno de los festivales del horror más queridos por el público y reconocido por los creadores del género, y su éxito y permanencia tiene que ver con su capacidad de adaptarse a las nuevas realidades:

No es un festival que aunque tenga tanto tiempo se quedó estancado en una estructura, en un modelo y a llorar porque el mundo cambia y ya no nos gustó. Parte de que el festival continúe por tanto tiempo es el saber adaptarse a los cambios. Han habido muchos cambios de muchos tipos durante todos estos años, incluso en el mismo contenido; la forma en la que se hace terror, lo que pasábamos al inicio a lo que se programa ya para esta edición.

En los últimos años se ha dado esta división entre los fans del horror por la popularidad del mal llamado “horror elevado”, muy profundo, filosófico, etc., y que hace que otros seguidores pidan el regreso de elementos más tradicionales y directos en el género como la sangre, las tripas y la violencia explícita. ¿Cómo hace Macabro para reconciliar estas dos posturas?:

Creo que justamente parte de lo que se hace con el festival es ofertar, poner a disposición de la gente y del público todo lo que se está viviendo en el momento en el cine contemporáneo en el género. Nosotros cada vez estamos más abiertos en cuanto a los contenidos y en cuanto a los géneros. Desde hace ya mucho tiempo sabemos que el género no es puro, hemos encontrado terror con comedia, que a muchos les gusta y otros lo aborrecen, terror con ciencia ficción, fantasía con ciencia ficción y terror, slasher, todos estos subgéneros son afines al terror y queremos mostrar este gran abanico. Por un lado mostramos películas contemplativas de terror y que algunos dicen que es demasiado denso en cuanto a que no pasa nada, y al final pasa de todo. Por otro lado están las películas que son más como homenajes al terror ochentero, ahorita está tan de moda retomar estos elementos que eran muy incorrectos, disparatados; era un terror muy divertido, y creo que muchos, al menos de mi generación, se encontraron en estas películas. Entonces, a nivel de la curaduría se busca mostrar un abanico amplio, el mostrar los temas que de alguna manera nos inquietan o que inquietan a los realizadores y realizadoras que están haciendo cine en este momento.

Se ha hablado mucho del terror social, que es algo que se presenta de forma muy frecuente sobre todo en el cine latinoamericano que empieza a tocar temas como las consecuencias de la dictadura, los problemas de violencia, del crimen organizado, vistos desde el ojo fantástico que ayuda hasta cierto punto a crear una distancia con el tema. No es tan crudo como se puede mostrar en otras películas, pero no deja de ser uno de los temas que inquieta porque produce miedo. Y ese es el punto, reflexionar o aproximarse de una forma visceral o emocional a los miedos colectivos. De hecho, hay un programa de cortometrajes que es justo eso, todos son mexicanos y todos son bastante fuertes en torno a este tema.

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En los últimos años, el lugar del terror en México ha mejorado mucho no sólo por las ofertas, también por las oportunidades de llegar a cines comerciales y a más público. Le preguntamos a Edna Campos cómo percibe el panorama del género en el país en los próximos años:

Yo veo que hay compañías productoras que trabajan a nivel profesional e industrial con presupuestos que son altos para nuestro país, posiblemente para Estados Unidos sean mínimos, pero creo que están enfocados en cierto tipo de películas. Todo lo que tiene que ver con posesiones y exorcismos funciona muy bien; a veces pueden ser trilladas, a veces pueden salir bien, a veces más o menos, pero funcionan a nivel de taquilla. Creo que de ese lado se nota también qué es lo que quiere consumir el público en cuanto a lo que oferta el género. Por otro lado están los realizadores que hacen las cosas con ayuda de algunos fondos, con ayuda de sus amigos, que son muy independientes, que guardan e invierten dinero y sacan sus películas. Y ahí es donde está la variedad, es donde encontramos estas historias que tienen que ver con el momento que vivimos. Toda esta zozobra que hay alrededor de que no nos sentimos seguros. Sí se exploran todos estos temas, pero también se exploran cuestiones de descomposición familiar, de descomposición social, creo que eso es bien interesante. Podemos ver thrillers, podemos ver películas que tienen referencias a cuentos folklóricos o de historias de ciertas zonas del país y a partir de eso vemos que hay, más que películas, cuentos de hadas oscuros que sí reflejan esta tradición que tenemos en el país de pensamiento mágico. Creo que por ahí seguirá. Hay mucha gente que quiere hacer cine de terror, llegaron muchísimos cortometrajes hechos en México.

Las mujeres directoras en el género de terror

La presencia femenina también va en aumento dentro del género, y la directora de Macabro asegura que este año será muy significativa:

Cada año son más y más mujeres. Podría decirte que esta edición va a ser la más feminista de la historia, y no necesariamente porque digamos “vamos a hacer una edición feminista”, no, es justamente porque esas son las inquietudes de este año.

Para terminar nuestra entrevista, le preguntamos a Edna Campos cómo invitaría a los lectores de Tomatazos para asistir a las funciones y eventos especiales de este año:

Invitaría a la gente que le gusta sorprenderse, que le gusta sentir la adrenalina, que le gusta divertirse, que les gustan los cuentos de sustos. A lo mejor la gente puede decir que no les gusta, pero lo podcasts de true crime, de historias paranormales y todo eso son los más escuchados en el país, entonces no me digan que no les gusta que les cuenten cuentos de terror. Era la tradición, que en algún momento hacías una fogata o algo así y todos contaban una historia de fantasmas; hagan de cuenta que es lo mismo aquí en Macabro. Nos juntamos para ver estas historias, para desmenuzarlas, para hablar con las que las hacen, para conocer no nada más lo que llega a nivel comercial, que a veces sí es muy reiterativo, sino para ver otras formas de contar estas historias de terror. Sí, por un lado pueden ser perturbadoras, por otro lado pueden ser divertidas, por otro lado pueden ser verdaderamente extenuantes, hay películas fantásticas que no necesariamente tienen un final terrible, tiene un final que te deja con un buen sabor de boca; todo eso es lo que se puede ver en Macabro. Yo invito a la gente que quiere conocer, que quiere salirse un poco de lo cotidiano y experimentar el otro lado oscuro, pero también el de la fantasía.

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