Ant-Man: El Hombre Hormiga resultó ser de esa clase de películas de las que no esperas gran cosa, pero al final sabe defenderse y sales de la sala con un buen sabor de boca.
De forma inteligente nos muestra a los dos personajes que han llevado el estandarte del Hombre Hormiga, el original, Hank Pim (Michael Douglas) y el novato, Scott Lang (Paul Rudd). Bien narrada, además de los clásicos chistes que ya son la firma de las cintas Marvel-Disney, interesantes secuencias de acción, tiene todo para ser un buen Vengador, por eso te traemos la fórmula secreta para que también te quieran dentro del grupo.
Consigue un súper poder
No todos pueden ser parte de un experimento que los dote de fuerza e ingenio sobrehumanos, ni ser mordidos por insectos radioactivos (bueno, quizá si eso pasara en la realidad, tremendo salpullido que te brotaría), pero siempre puedes nacer millonario y construir tu propia armadura de oro con titanio o entrar a robar a la casa de un científico que ya tenga una.
Vístete de manera adecuada
En este caso el súper poder ya venía con la asesoría de imagen incluida.
Pero recordemos casos menos afortunados...
Consigue aliados
No está de más tener siempre un plan de respaldo y si los Vengadores no te quieren en sus filas, por lo menos siempre podrás tener tus propias fuerzas especiales.
Un buen patiño
Se muere su madre, deportan al padre, lo deja la novia... pero conserva la van. Hazte a un lado, Buckie, nadie supera a Michael Peña como patiño. Nadie.
Ten una batalla épica
Las grandes batallas siempre estarán a la altura de los héroes.
Busca el eslabón más débil y pelea con él
Finalmente, busca al más débil del grupo y dale una paliza, para que sepan quién manda. Después hazte el desentendido y espera a que ellos te busquen.
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