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Dirigida por el estadounidense Cary Fukunaga (director también de películas como Beasts of No Nation - 92%, de 2015; y de Jane Eyre - 84%, de 2011, entre otras), Sin tiempo para morir - 83% (No time to die) es la despedida del actor británico Daniel Craig del famoso agente 007, James Bond. Trepidante cinta de acción, aventura y suspenso, basada en la historia base de Ian Fleming , Sin tiempo para morir cuenta con un guión a cargo de Neal Purvis , Robert Wade , Scott Z. Burns , Cary Joji Fukunaga y Phoebe Waller-Bridge. Producción Estados Unidos-Inglaterra y con una duración de dos horas y 43 minutos, Sin tiempo para morir cuenta con las actuaciones adicionales de Ana de Armas, Rami Malek, Léa Seydoux, Billy Magnussen, Ralph Fiennes, Ben Whishaw, Naomie Harris, Lashana Lynch, Jeffrey Wright y Christoph Waltz, entre otros.

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Retirado del servicio activo, Bond (Daniel Craig) disfruta brevemente de una vida tranquila en Jamaica. Sin embargo, la repentina aparición de su amigo, el agente de la CIA, Félix Leiter (Jeffrey Wright) romperá su efímera paz. Inmerso ya en la misión de rescatar a un científico secuestrado, Bond no tardará en descubrir lo complicado y peligroso de su nueva tarea, enfrentar a un misterioso villano llamado Lyutsifer Safin (interpretado por Rami Malek), quien se encuentra armado con tecnología nueva y peligrosa. Misión para la cual recibirá nuevamente la ayuda de sus viejos amigos: M (Ralph Finnes), Moneypenny (Naomie Harris), Q (Ben Whishaw), así como la de la nueva agente 00 (Lashana Lynch).

Puede que para una pequeña parte de la crítica Sin tiempo para morir - 83% resulte una historia que se ciñe a la ya conocida fórmula de películas de Bond, sin ningún mayor atractivo. Presentando a un Daniel Craig, aunque en buena forma física, sin duda mayor, para este segmento de la crítica ésta resulta una despedida no sólo fallida, sino poco emocional de su etapa como el agente 007.

No obstante la mayor parte de los críticos piensan en términos distintos. Resaltando aspectos tan variados como la aportación humorística de Phoebe Waller-Bridge al guión de Sin tiempo para morir, la cual deja ver a un James Bond ya no sólo más vulnerable, como en entregas anteriores con Craig encarnando al personaje, sino con un mayor sentido del humor; la química de Craig y Seydowx en pantalla, tal vez la relación más intensa y creíble planteada hasta ahora en la vida del personaje; sus fantásticas escenas de acción imposible, destacando de forma especial su secuencia final; una banda sonora que mezcla a la perfección retazos del clásico y nostálgico tema de James Bon, en esta ocasión a cargo de Hans Zimer; y, sobre todo, la fidelidad interpretativa de Daniel Craig en la construcción de un Bond que reúne lo mejor del viejo y el nuevo mundo.

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Para finalizar les ofrecemos un breve sumario de críticas, reseñas y calificaciones representativas de Sin tiempo para morir - 83%, cinta aquí analizada:

Scott Mendelson señala en Forbes:

La película socava el atractivo de la franquicia como entretenimiento escapista. Que Daniel Craig parezca lo suficientemente mayor para ser el padre de Seydoux es un problema aún mayor aquí que en Spectre.

En el mismo tono, Bilge Ebiri comenta para Vulture:

… el material no tiene sustancia: sigue siendo la misma tontería cansada, sólo que durante más tiempo y con todos los elementos agregados para dar a la historia y a los personajes un peso emocional que en su mayoría fallan en el resultado.

Cambiando de enfoque, Alex Flood describe para NME que:

El final es asombroso, de hecho, puede ser el más grande en la historia de Bond. La relación de Craig y Seydowx se siente totalmente creíble, su química es más intensa que cualquier romance de Bond que hayamos visto antes.

Para Showbiz 401, Roger Friedman argumenta lo siguiente:

Las piezas son muy, muy intensas, con mucha emoción que fluye en la sangre. Fukanaga cumple el rol de director de Bond, aportando inventiva a cada situación.

Tessa Smith opina para Mama’s Geeky:

Daniel Craig brilla absolutamente en Sin tiempo para morir. Es un James Bond fantástico, algo con lo que muchos fanáticos pueden estar estar de acuerdo. En esta película continúa con la misma actitud con la que siempre se acercó al personaje y le da una despedida adecuada.

Roger Moore sentencia por su parte para Movie Nation que:

Craig, en su turno final en el papel, hace que Bond no sólo sea vulnerable (ya lo ha logrado antes) sino alguien con sentido del humor (…) ese guiño hace que su última película como el personaje sea más divertida.

Para The playlist, Robert Daniel escribe que:

Para aquellos que han tomado a Craig y Bond como sus principales preocupaciones: su espera vale la pena. La escena final es la secuencia más desgarradora en la historia de la franquicia.

En entertainment.ie, Deire Molumby apunta:

Un acierto es la contribución de la creadora/estrella de “Fleabag” Phoebe Waller-Bridge al guión. Hay ciertos momentos y líneas humorísticas en la película que tienen su nombre por todas partes.

Leah Greenblatt subraya en Entertainment Weekly:

… es una despedida conmovedora, grandilocuente y agridulce: une fielmente el viejo mundo y el nuevo hasta el último rincón (…) llena de la intriga y los artilugios que le dan a Bond la brillante arrogancia que siempre ha tenido…

En tanto que David Rooney resalta en The Hollywood Reporter que:

… hay mucho aquí para que los fanáticos de Bond disfruten, con un escalofrío de emoción cada vez que la conmovedora partitura de Hans Zimmer se cuela en algunos compases del clásico tema original de Monty Norman.

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