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¿Qué verdades estamos dispuestos a ocultar con tal de conseguir lo que queremos?, ¿Qué papeles podemos interpretar en la vida real para ser aceptados y queridos por los demás?, ¿cuánto de la verdad estamos dispuestos a contarnos a nosotros mismos para poder reconciliarnos con nuestro pasado? Estas preguntas son las que plantea el director Hirokazu Koreeda (Un Asunto de Familia - 100%, Nuestra Pequeña Hermana - 93%) en su nuevo proyecto, La verdad - 93%, su primera película que filma fuera de Japón, bajo un tono de tragicomedia y melodrama, en el cual vuelve a explorar las relaciones familiares de la mano de las extraordinarias Catherine Deneuve y Juliette Binoche.

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El guion de La verdad - 93% nació como una obra de teatro, la trama de esta cinta se centra en Fabienne (Deneuve), una actriz del cine francés, una estrella que se encuentra en el ocaso de su carrera, pero que no teme admitir que prefiere haber sido buena actriz que buena madre. Ella es una diva que reina entre hombres que la aman y la admiran, aunque en su mundo personal tiene grandes conflictos con su hija Lumir (Binoche), una guionista que vive en Estados Unidos. En el momento en que Fabienne publica un libro de memorias acerca de su vida personal, Lumir viaja desde Nueva York a París para felicitar a su madre por la publicación y reencontrarse con ella después de años sin verse. El encuentro entre ellas se convertirá en un enfrentamiento donde se revelan verdades, se ajustarán cuentas y se hablará de amor y resentimientos, después de que la hija descubre que su progenitora ha omitido muchos aspectos importantes y ha manipulado los hechos a su conveniencia en el libro titulado ''La Verdad''.

La verdad - 93% explora las profundas complejidades entre una relación de madre e hija, además, el guion de esta cinta aborda otros temas como el cine, la soledad, la pérdida, los sacrificios familiares por la vida profesional, el abandono, el perdón, el valor de las memorias y la fama. Aunque todo esto está filmado desde una propuesta naturalista y con una notable ambición, el director nunca consigue profundizar lo suficiente en sus propias inquietudes ni en las de sus personajes. La cinta parece avanzar como un álbum fotográfico familiar en el que se pueden encontrar fotos y recuerdos con una excelente calidad visual, pero con historias y momentos que se han visto una y otra vez en el cine y mucho mejor contadas. A pesar de que al inicio consigue intrigarnos, las expectativas se desinflan cuando nos damos cuenta que la película ha llegado a su primera mitad sin contar algo impresionante y las preguntas dramáticas que plantea no son suficientes ni impredecibles.

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Los personajes de La verdad - 93% resultan entrañables, pero esto es gracias al espléndido trabajo de interpretación de sus dos protagonistas. Deneuve (Bella de Día - 95%, Repulsión - 100%, Los Paraguas de Cherburgo - 98%) encaja a la perfección en un rol que resalta su estatus de actriz legendaria, es imposible no encariñarse con ella incluso cuando su personaje es frívolo y arrogante, la veterana intérprete nos revela con su mirada que debajo de esa expresión se encuentra un ser con mucho corazón. Binoche (Tres Colores: Azul - 100%, El Paciente Inglés - 83%, Copia Fiel - 88%) quien siempre es garantía de una buena actuación, vuelve a conseguir que nos conectemos con las emociones de su personaje con una interpretación que se sustenta en el realismo parara potenciar la vulnerabilidad de Lumir.

La cinta está filmada con una cámara inquieta, que también se encuentra en busca de la verdad y utiliza movimientos fluidos y una selección de encuadres bastante estratégica cuando se trata de ahondar en los secretos y las relaciones más íntimas de los personajes. Realmente destaca el trabajo de cinefotografía y el director aprovecha cada encuadre para revelar u ocultar aspectos de la trama y recordarnos que no todo en esta cinta es lo que parece. Esa línea que divide la realidad de la ficción queda desdibujada en este relato en el que destaca más la forma que el fondo. Sobre esa misma línea, el diseño de producción hace un gran trabajo al construir espacios con una exquisita estética francesa que nos sumergen en todo tipo de atmosferas, pero siempre con la sensación de que hay algo más por descubrir entre todos esos objetos en los que se esconden memorias.

En general, La verdad - 93% es una película que no cumple con todas las grandes expectativas que genera el talento involucrado. Aunque Koreeda decide apostar por una pieza reflexiva y más emocional para explorar temas que ha tocado antes en su filmografía, en esta ocasión el resultado no se compara con la calidad de sus mejores trabajos. El problema radica en un guion al que le faltó desarrollo a la trama y a los personajes, un guion al que le sobran varias páginas para acortar la duración de un filme que se extiende solo con el fin de llegar a ser más emotivo. El talento y el sello del realizador siguen aquí, pero es notable que no aprovecha al máximo sus habilidades entregándonos una película que parece haber sido realizada para televisión. Aunque las ambiciones del director son altas, con una delicada y hermosa propuesta visual a la que se le suma un elenco de primer nivel, La verdad - 93% no quedará entre los mejores trabajos de su filmografía. Si eres fan del trabajo de Deneuve y Binoche podría llegar a convencerte e incluso a conmoverte, de lo contrario puede ser una cinta apenas significativa que nunca consigue aterrizar su vuelo.

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