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Toronto 2018: Assassination Nation ya tiene primeras críticas

Assassination Nation, comedia negra / thriller escrita y dirigida por Sam Levinson, ya está recibiendo sus primeras reseñas

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Toronto 2018: Assassination Nation ya tiene primeras críticas

Assassination Nation, comedia negra / thriller escrita y dirigida por Sam Levinson, ya está recibiendo sus primeras reseñas

POR Staff -

El ciclo de festivales de cine está en su pleno apogeo, ahora desde los lejanos parajes del Festival Internacional de Cine de Toronto llegan las primeras críticas de Assassination Nation, una reinterpretación de los juicios de Salem, aquella tórrida historia de 20 mujeres que fueron ejecutadas por ser acusadas de brujas, aquella época en la que lo único necesario para terminar enjuiciado, violentado y achicharrado, era ser señalado por el dedo huesudo de algún vecino desnutrido, preso de las alucinaciones ocasionadas por el hongo del trigo que hoy nos sirve para hacer LSD.

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Esta reinterpretación de Sam Levinson ha sido llamada por algunos usuarios de Reddit como “La Purga con Cyberbullies en medio”. A lo largo de los años, el hecho histórico ha alimentado diversas historias, incluso una obra teatral escrita por Arthur Miller . En la versión de Levinson existe un detonante bastante verosímil para los estándares actuales: Twitter. Una red social parece bastante inocua, hasta que una comunidad en medio de la nada la utiliza para organizar un linchamiento (True story, no hace mucho ocurrió en México). En la cinta de Levinson 4 adolescentes son obligadas a tomar las armas cuando un hacker destapa toda la corrupción de la ciudad.

El ataque frontal de Levinson en su versión hardcore de Chicas Pesadas - 83%, de acuerdo a los críticos se le sale de las manos llegando a los excesos que disuelven su discurso en una conglomeración de escenas que no se deciden entre tomar un discurso moralino o la farsa, lleva de violencia extrema, sin sentido. El director deja demasiados cabos sueltos y llega a un punto en el que no sabe a quién está atacando con su discurso.

La premisa de la película reza: “Los adultos son demasiado ingenuos creyendo en la intimidad, mientras los jóvenes, por lo menos, al saber que ésta es inalcanzable, sólo intentan controlar lo que llegará al gran público”. Al igual que en el caso de la brujas de Salem, los primeros mártires fueron hombres de mediana edad, después la degradación fue llegando hasta las partes más vulnerables de la sociedad.

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Todo se explica con las palabras de apertura de Lily (Odessa Young): “Esta es la historia de cómo mi pueblo, Salem, perdió la jodida razón”. De acuerdo a Jordan Raup de Film Stage, el problema de Levinson no fue tratar de hacer una película de drama, horror, thriller, acción o de crecimiento… el problema fue tratar de hacerlas todas en una sola película, sin realmente lograr una cohesión entre todos los géneros.

Además del género, Raup, hace hincapié en que Levinson trata un montón de temas y ninguno lo desarrolla realmente, “sexismo, transfobia, racismo, intento de violación, egos masculinos frágiles, tortura; lo que te imagines... está ahí”.
La cinta ha ganado puntos por su naturaleza extraña, pero en general, los críticos han calificado de forma regular, más hacia lo negativo, a la cinta, por sus intenciones nada claras, su casi carente cohesión, que la vuelve muchas cosas y realmente nada a la vez.

Jordan Ruimy en The Playlist:

El clímax, que encuadra a las chicas rudas de Levinson, empuñando las espadas y caminando en cámara lenta por las calles de su vecindario suburbano, buscando venganza, es ridículo, pero tal vez ese sea el punto, todo hecho adrede. Esta es la oda de Levinson al exceso estadounidense, donde nada viene por casualidad y el potencial de la sociedad para desmoronarse en el caos está a solo un clic de distancia.

Leslie Felperin en The Hollywood Reporter:

Energéticamente espeluznante, violencia gratuita y un montón de diversión, la sátira de horror Assassination Nation es una vuelta a la comedia negra adolescente, esas películas de antaño, pero con una sensación mordaz y oportuna.

Eric Kohn en Indie Wire:

La película de Levinson tiene un ritmo rápido y abrumador, con casi todas las escenas diseñadas para imitar la naturaleza fragmentada de la juventud actual. Pantallas divididas que muestran a la vez cadenas de mensajes de texto, videos virales desagradables que abarrotan el encuadre cuando las chicas no están reunidas hablando sobre los efectos dañinos del hackeo en sus vidas. Levinson se esfuerza por mantener un estilo relajado ante tanta información, pero termina demostrando por qué es imposible que los escándalos de hackeos sean totalmente entendidos por aquellos que se criaron en un mundo analógico.

Amy Nicholson en Variety:

Pocas películas han descubierto cómo abarcar todas las contradicciones de la seducción femenina y las victorias del poder femenino que también pueden recuperarse y dejarlas destrozadas. Zambullirse en él es una elección arriesgada para un joven director de cine, y Levinson compensa en exceso al transformar a las chicas, que al principio eran tan corruptas como todos los demás, en un valiente escuadrón de la muerte.

Barry Hertz en The Globe and Mail (Toronto):

Centrándose en un pequeño pueblo estadounidense llamado Salem (¡sí!) que pierde su mente colectiva después de que un hacker publica secretos almacenados en los smartphones de todos, Assassination Nation es un buffet de ofensividad escandalosa. Pero Levinson parece más preocupado por simplemente mantener un nivel básico de shock que por cuestionar cualquier construcción social.

Jordan Raup en The Film Stage:

Una película que intenta tan dolorosamente ser de su tiempo que todos los matices se arrojan por la ventana a favor de un confuso ataque a los sentidos. Eso no quiere decir que algunos de los elementos de coming of age-acción-thriller-drama-horror de Sam Levinson no son efectivos, es solo que al tratar de hacer todo, parece que no se logra nada.

Vince Mancini en Uproxx:

Assassination Nation parece estar enamorada de su propia provocación. Pero solo es realmente provocativa comparada con los arquetipos de la familia nuclear de los 50 de los que ocasionalmente depende. Quiere provocar, pero probablemente necesita algunos borradores más para descubrir por qué.

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