Artículos

Grindhouse, de Quentin Tarantino y Robert Rodriguez, ¿qué dijo la crítica en su estreno?

Este homenaje al cine de explotación del pasado fue el intento de dos cineastas de recrear cierto estilo de películas, con resultados bastante mixtos

Artículos

Grindhouse, de Quentin Tarantino y Robert Rodriguez, ¿qué dijo la crítica en su estreno?

Este homenaje al cine de explotación del pasado fue el intento de dos cineastas de recrear cierto estilo de películas, con resultados bastante mixtos

POR Ruben Martínez Pintos -

Una sala de cine "grindhouse" se refiere a recintos cinematográficos, la mayoría construidos desde la década de los 30, en los que se exhibían cintas de serie B de baja calidad (tanto de producción y hechura como de guión) y por las que se cobraba más barato comparado a cines de mayor prestigio. Debido a que estas cintas eran más fácil adquirir sus derechos de exhibición estas salas ofrecían dobles funciones o permanencia voluntaria que podía durar toda la noche. En México el equivalente serían las salas de cine "piojo" donde también se ofrecían películas con tramas sórdidas que ofrecían explosiones y senos al por mayor. Salas en las que iban vagabundos a dormir, a consumir drogas y que bien podían oler a orines y tener ratas de cabo a rabo.

Lee también: Rose McGowan ya no presentará públicamente su libro por una discusión que tuvo con una asistente: "todos me fallaron"

Con el empuje de la televisión y el video (ya fuera el Betamax o su rival el VHS), además del cambio en el paisaje urbano, estas salas de cine desaparecieron de forma permanente. Los que lograron visitarlas quedaron enamorados de su atmósfera particular y dos de sus fans más grandes en Hollywood son Quentin Tarantino y Robert Rodriguez. Para 2007 estrenarían Grindhouse - 83%, un intento por homenajear y revivir el tipo de cine por el que se caracterizaron estos templos del cine chatarrero. Ya fueran películas de horror, blaxploitation, artes marciales o delirios del cine de explotación italiano, estos lugares mostraban todo lo que el público y críticos finos no se atrevían a ver (o a admitir que veían).

El experimento consiste en dos películas, A Prueba de Muerte - 67% y Planet Terror y en medio de ambas una serie de cortometrajes para cintas falsas, dos de las cuales eventualmente serían llevadas a la realidad (Hobo with a Shotgun y Machete - 72%). La taquilla no fue particularmente fuerte y es que seguramente el público general, poco acostumbrado al formato, quedó profundamente desorientado al ver dos cintas y una serie de tráilers falsos que se veían bastante reales. Las cintas de Quentin y Robert eventualmente saldrían en versiones más extendidas en solitario.

El resultado obtenido es el equivalente a una banda de covers que tocan "De Música Ligera" en tu bar de confianza. No suenan mal pero sabes perfectamente que jamás serán iguales a la versión original. El proyecto podrá haber sido un intento genuino de homenajear una época muy particular, pero existe un inevitable anacronismo al hacer cintas de alto presupuesto y efectos más sofisticados para homenajear cine que no poseía dichas cantidades de dinero para filmarse. Además, las historias contadas por Quentin y Robert carecen de la naturaleza sórdida de lo que se hacía en los 70, una era en la que varios directores no temían ser políticamente incorrectos para atraer a la gente. Dicho sea en otras palabras, Grindhouse es una versión más tibia y fresa de las verdaderas cintas que estos realizadores quieren imitar, cintas como Invasion de los Zombies Atómicos - 40% del italiano Umberto Lenzi, o Vanishing Point, cinta contracultural que Tarantino adora y le dedica varios diálogos en Death Proof, pero que al parecer no entiende que hacía a dicha película ser tan excepcional. No esta mal para audiencias jóvenes impresionables que no han visto mucho cine, pero para los que busquen las verdaderas experiencias grindhouse, esto causará más bostezos que alaridos. Varios críticos fueron amables con el experimento, pero alguien como Roger Ebert no quedo impresionado y vio la cinta precisamente por lo que era y no por lo que pretendía ser.

Lee también: Las mejores películas de Robert Rodríguez según el Tomatómetro

Roger Ebert:

A la hora de fabricar malas películas con apariencia del pasado, tanto Tarantino como Rodriguez fracasan al hacer cintas que no pudieron existir en la era de los cines grindhouse, para una audiencia que tampoco existe ya.

Sean Burns, Philadelphia Weekly:

Tarantino parece no darse cuenta que aquí se convirtió en una parodia de si mismo.

Lisa Rose, Newark Star-Ledger:

Llevada al extremo que hace a "300" parecer un caso minimalista.

Peter Rainer Christian Science Monitor:

Un divertido y nostalgico pasatiempo.

Gene Seymour, Newsday:

Un momento de indulgencia del cual no te arrepentiras.

Kirk Honeycutt, Hollywood Reporter :

Es una partida doble de perversidad e impactante contenido, de ambas películas una es mejor que la anterior.

Christy Lemire, Associated Press:

Si tienes un gusto particular por la sangre y tres horas de asesinatos, "Grindhouse" es para ti.

Lee también: Robert Rodríguez hizo Grindhose para vengarse de los abusos de Harvey Weinstein

Comentarios

  • Tomatazos

  • Facebook

 
 
  • Mejores

  • Nuevos