Tomatazos

El viaje como experiencia iniciática es el motor de Camino a Marte. Más que una aventura o pasatiempo la travesía busca pavimentar el duelo de la joven protagonista enferma terminal. La amistad es otro de los elementos que explora el cuarto largometraje de Humberto Hinojosa Ozcariz, así la expedición de Emilia (Tessa Ia) en compañía de su explosiva amiga Violeta (Camila Sodi), cómplice de la necesidad de esa apremiante huida, deja claro para el espectador que la identidad de una depende en buena medida en la fuerza de los apegos previos de ambas. El viaje aderezado con el elemento de la casualidad, transformará el destino de ambas camaradas, que de manera sorpresiva chocan, literal, con un desconocido que asegura viene del espacio exterior (Luis Gerardo Méndez).

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Es en las playas de Baja California que se desarrolla la trama de Camino a Marte, allí, los protagonistas movidos por sus particulares crisis existenciales aprenderán a convivir y a lamerse las heridas, mientras un huracán amenaza con no dejarlos llegar al litoral favorito de Emilia. El maridaje de viaje en automóvil y carreteras, más escenarios naturales raya por momentos con el anuncio turístico, que se salva por la química y naturalidad de Ia (Después de Lucía - 80%) y Sodi (Niñas Mal, Compadres, El Placer es Mío - 60%, Cómo Cortar a tu Patán), especialmente Tessa, cuyo personaje parece encontrar serenidad en la estrecha relación que va desarrollando con ese extranjero al que bautizan como Mark (Luis Gerardo Méndez), portagonista de la exitosa serie de Netflix, Club de Cuervos - 78%.

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Las primeras reacciones a este dramedy, al que también se le ha anunciado con elementos de ciencia ficción tiene, hasta el momento, una recepción positiva por parte de periodistas cinematográficos que ya vieron el filme. Será hasta el fin de semana que la película alcance un mayor número de críticas y sepamos cuál es el veredicto final de la crítica. Algunos consideran que su trama es fresca y que sale del común denominador de comedia romántica mexicana:

Erik Estrada, Cinegarage:

Afortunadamente, como tampoco lo hizo en sus historias anteriores, Hinojosa no se repite y se decide por un clarísimo road movie de tintes apocalípticos, que en un principio engaña con transformarse en la versión desencantada de un México completamente desquiciado de aquella jovial y enamorada (de un México enamorado de sí mismo) Y tu mamá también (México, 2001), pero que muta oportunamente para entregar sus propias propuestas y separarse de manera clara de la parodia y la referencia fácil.

Cecilia Ballesteros, El País:

Un filme que mezcla el género de la road movie con la ciencia ficción, una mezcla setentera y casi insólita en el cine mexicano y que es una de las más esperadas.

Jacob Oller, Roger Ebert.com:

Un romance adolescente que se desarrolla en un viaje por carretera y que tiene sus mejores logros gracias a la química de su elenco (Luis Gerardo Méndez, Camila Sodi y Tessa Ia), una divertida trama de película serie B que se desarrolla a lo largo de las hermosas y desoladas carreteras desiertas.

Sector Cine:

Una producción fresca que deja atrás el esquema narrativo al que nos hemos acostumbrado en el cine nacional.

Arturo Magaña, Cine Premiere:

Aquí no estamos frente a una típica comedia romántica mexicana, sino a una mezcla de un drama con una feel good movie que coquetea muy discretamente con la ciencia ficción únicamente para sostener su argumento durante toda la historia y reforzar el lazo de amistad y solidaridad entre sus tres protagonistas.

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