El termino más usado para los finales inesperados en el cine es el “giro de tuerca”. Normalmente se trata de una historia que es narrada siguiendo una dirección y de pronto cambia de rumbo drásticamente, pero siguiendo la lógica de su planteamiento inicial para no perder verosimilitud. Dar el volantazo en una narración suena fácil pero es muy arriesgado, el objetivo es sorprender pero si es mal utilizado podría decepcionar al público y obtener como resultado algo ridículo. La sorpresa en una película es lo que logra que permanezca por mucho tiempo en la mente del espectador generando también conversación fuera de las salas.
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El giro de tuerca puede ser utilizado en cualquier género, desde la comedia, el drama y hasta el terror, pero donde más se ha explotado este elemento es en el suspenso, pues lo que identifica a este género es que nunca se está del todo seguro cómo terminarán las cosas. Sin duda, los cineastas que se han atrevido a escribir un giro al final de sus guiones deben tener una gran habilidad para engañar y muchos seguramente hicieron pensar a más de uno “¡¿Qué está pasando?!”, por eso, a continuación te presentamos los 10 mejores finales inesperados en el cine.
Christian Bale interpreta a un hombre de negocios bastante exitoso en Wall Street, adinerado, y con una obsesión por la perfección y la belleza de sí mismo. Es un hombre que hace hasta lo inimaginable para lucir perfecto y está seguro que más de uno quisiera parecerse a él, lo cual le fastidia. La directora Mary Harron plantea al personaje como un hombre perfecto que tiene toda una rutina en su vida diaria: ejercitarse, usar tratamientos para su piel, salir con algunas chicas y satisfacer sus necesidades sexuales, concluyendo, ¿por qué no?, con algunas personas descuartizadas. Normalmente sus víctimas son individuos que de alguna manera se ganaron su desprecio o simplemente lo utiliza como una manera de relajarse. Así como algunas personas hacen yoga después de salir de la oficina, él mata gente.
Justo cuando los espectadores ya entendieron el comportamiento de Patrick Bateman (Christian Bale) y aceptan su rutina, al final resulta ser no más que un hombre frustrado con serios problemas psicológicos; cuando él decide confesar los homicidios que cometió descubre que todo pasó solamente en su mente, no mató a nadie, sólo lo imaginó. Tan bien que se veía asesinando al ritmo de “Hip to be Square” de Huey Lewis & The News.
Protagonizada por Belén Rueda, esta es la historia de una mujer que compra el viejo orfanato donde ella creció para vivir con su esposo y su hijo, además de seguir ofreciendo algunos servicios para los niños. Todo comienza a volverse tensión cuando el pequeño Simón empieza a comunicarse con lo que en un principio parece ser su amigo imaginario y de pronto el niño desaparece. Desesperados por no dar con el paradero de su hijo, la pareja comienza a hacer de todo para hallarlo, como contratar a una psíquica (interpretada por Geraldine Chaplin) que descubre que el lugar está lleno de fantasmas de niños. La película dirigida por J.A. Bayona plantea el miedo más allá de los sustos fáciles enfocándose más en la ansiedad del espectador, y lo que comienza como la historia desarrollada en una casa llena espectros tiene un giro más aterrador de lo que cualquiera pudiera esperar.
Llegando al desenlace de la película, Laura (Belén Rueda) descubre que el fantasma que veía era su propio hijo al que, accidentalmente, ella encerró en el sótano. Todos los ruidos espantosos que ella escuchaba detrás de las paredes los provocaba el mismo Simón cuando intentaba salir hasta que murió. Sin duda fue un final intenso, pero que nadie vio venir.
En esta película Martin Scorsese llevó el misterio a niveles impensables. Presenta a un par de agentes de Estados Unidos, Leonardo DiCaprio y Mark Ruffalo, que investigan la desaparición de unos asesinos que huyeron de una institución para criminales con algún desorden mental ubicada en una isla. Todo funciona tal y como se espera de una película del director, pero el giro que da al final es, para algunos, muy difícil de digerir porque a todos toma por sorpresa.
El impacto llega cuando resulta que Teddy (DiCaprio) es uno de los convictos, a pesar de que él está totalmente convencido de que era el investigador, finalmente recuerda quién es: un hombre que asesinó a su esposa después de que ésta matara a sus propios hijos. Por eso él está preso en ese lugar, pues el impacto le provocó grandes desordenes psicológicamente.
Nicole Kidman interpreta a una mujer que protege a toda costa a sus hijos después de que su esposo se va a Segunda Guerra Mundial para no volver jamás. Decidida a ser el sostén del hogar, enfrenta situaciones difíciles ya que no se siente segura en otro lugar que no sea su mansión, además sus hijos no pueden ser expuestos a la luz del sol por ser fotosensibles. Tras la desaparición de los trabajadores de su casa, decide contratar a una familia para que se encarguen del cuidado del lugar mientras ella se ocupa de educar a los niños. Pero todo comienza a volverse espantoso cuando en la casa empiezan a pasar cosas extrañas y la niña asegura comunicarse con un espíritu.
Después de parecer una historia común de una mansión embrujada, muy bien contada, Grace (Nicole Kidman) descubre que en realidad ella y sus hijos están muertos, y son ellos los fantasmas atrapados en esa mansión, donde los nuevos inquilinos son los vivos que intentan terminar con las manifestaciones de los habitantes muertos. Al final la protagonista recuerda que al ver que se había quedado sola con sus hijos tras el final de la guerra, asesinó a sus los dos niños con un tiro en la cabeza terminando después con su propia vida.
Una adaptación más de las exitosas novelas de Stephen King con un tinte apocalíptico. Un grupo de personas quedan atrapadas en un centro comercial cuando la niebla cubre las calles acompañada de unos extraños seres que matan a cualquiera que esté cerca. Después de muchos intentos fallidos de huir y salvarse, el protagonista, interpretado por Thomas Jane, sale al pueblo con su hijo y otros sobrevivientes en un auto que a pocos kilómetros se queda sin gasolina. Resignado, decide matar a cada uno de los que quedan dentro del auto, incluyendo a su hijo. Él queda vivo y devastado puesto que su arma quedó sin balas.
El gran giro, cruel y pesimista, llega cuando después de un rato aparece un convoy del ejército con algunos sobrevivientes del ataque de las criaturas. Por supuesto, él queda salvado, pero si tan sólo hubiera esperado un poco más, no hubiera sido necesario terminar con la vida de nadie.
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Esta es una de las películas que más ha jugado con la mente de los espectadores. David Fincher presenta una oscura comedia protagonizada por Brad Pitt y Edward Norton, en la que este último vive en una gran depresión. Después conoce a Tyler Durden (Brad Pitt), quien cambia su vida por completo, le enseña a disfrutar la vida y vivir sin preocupaciones aprendiendo a desahogar toda su furia de una manera muy particular: pelear a golpes con otros hombres que más adelante forman un club, el Club de la Pelea del que está prohibido hablar.
Justo cuando el personaje de Norton decide separarse de Tyler y el club al sentirse manipulado, tiene una frustrante revelación: Tyler Duren es él mismo, todo el tiempo lo fue. Resulta que este oficinista deprimido sufre de un trastorno de doble personalidad, de alguna manera sabía de la existencia del otro, pero no sabía que era él. Así que cualquier acto cometido por Tyler lo había hecho él, teniendo como resultado la épica escena de Edward Norton golpeándose a sí mismo.
Star Wars: Episodio V - El Imperio Contraataca - 94%
De la exitosa saga de Star Wars, esta es la segunda película de la trilogía original, en la que Luke Skywalker (Mark Hamill) se enfrenta en una gran batalla con Darth Vader donde éste termina cortándole la mano con el sable de luz, y el público es testigo del giro que tan famoso se hizo tanto en la industria cinematográfica como en la franquicia misma. Sin duda uno de los momentos más épicos en la historia del cine es cuando Luke se enfrenta a la peor de las verdades con la más famosa frase de Darth Vader: “Luke, yo soy tu padre”.
Una de las más famosas obras de Alfred Hitchcock es Psicósis, donde además de hablar de unos misteriosos asesinatos en el Motel Bates, el director presenta una relación extraña entre Norman (interpretado por Anthony Perkins) y su madre, quien parece ser la autora de los crímenes cometidos en el Motel después de presenciar su silueta en la famosa escena de la ducha. La sorpresa de esta historia llegó tan lejos que incluso trajo años más tarde una serie basada en esta película donde se da a conocer la juventud del protagonista y cómo fue la relación con su madre desde años antes de los crímenes.
Y es que la sorpresa llega cuando una joven huésped entra a la casa de los Bates y descubre que la madre está momificada. Finalmente los policías del pueblo se percatan de que todos los asesinatos los cometió el mismo Norman disfrazado de su madre, pero todo de manera inconsciente pues tiene un desorden mental que le hace pensar que todos los actos los comete su madre y no él.
La película que lanzó al éxito a James Wan, inspirada en el subgénero de terror italiano llamado Giallo en el que la historia no se centra en el criminal sino en cómo se cometen los crímenes. Presenta a dos hombres atrapados en lo que parece ser un viejo baño sucio, que tienen que seguir con una especie de juego en el que uno de los dos tiene que morir para que el otro quede libre, haciéndolos enfrentarse a su propia moral al igual que a sus más grandes temores.
El giro de esta escalofriante historia llega cuando uno de los hombres logra liberarse cortando su propia pierna y cuando logra salir por ayuda, quien se queda esperando descubre que un cadáver que se encontraba en el mismo lugar se levanta y resulta ser quien los encerró ahí y les puso esas espantosas pruebas.
Sin duda esta ha sido una de las películas más emblemáticas del suspenso y del director M. Night Shyamalan, antes de que estrenara Fragmentado - 
75%. Incluso los críticos han calificado a esta cinta como uno de los finales más impactantes en la historia del cine, y esto nadie puede negarlo ya que a pesar de los años, la historia sigue sorprendiendo al público. Presenta a un psicólogo especialista en casos infantiles, interpretado por Bruce Willis, que trata de ayudar a un pequeño que asegura tener contacto con gente muerta. Bruce le ayuda a manejar este nuevo talento mientras que en su familia todo parece ir mal.
En el desenlace, el protagonista descubre que él está muerto y por eso el niño podía hablar con él y su esposa parecía ignorarlo. Evidentemente esta película tiene muchas más cosas de fondo que, quienes se volvieron sus fans, han descubierto cada vez que vuelven a verla.
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