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El día de hoy, 25 de diciembre, se estrena en los cines de México Pasajeros - 30%, película que combina elementos de ciencia ficción con un toque de drama para contar una historia futurista que es protagonizada por Jennifer Lawrence y Chris Pratt. Luego de haber sorprendido al mundo entero con su excelente trabajo en la dirección de El Código Enigma - 90%, Morten Tyldum regresa con una cinta que causó muchas expectativas desde que fue anunciada, pero que, hasta ahora, no ha logrado convencer a los críticos y se perfila para convertirse inevitablemente en una de las decepciones de este 2016.

La trama de Pasajeros se desarrolla en un futuro aparentemente no muy lejano en el cual la humanidad se ha visto obligada a abandonar la Tierra con el objetivo de encontrar otros planetas para poder colonizarlos, el largo viaje a través del universo tiene una duración de 120 años y es realizado por un grupo compuesto por miles de personas que se convierten en los pasajeros de una nave espacial que los transportará a una lejana colonia ubicada en medio del inmenso espacio.

Todos los que van a bordo de la nave permanecen dormidos por medio de un sueño inducido que durará todo el viaje, todos descansan en cámaras especiales y sólo deben esperar tranquilamente que llegue el momento de despertar, pero las cosas se complican para uno de los pasajeros luego de que éste se despierta antes de tiempo como consecuencia de una falla imprevista en los sistemas. Un joven mecánico llamado Jim (Chris Pratt) comienza a desesperarse ante la posibilidad de envejecer y morir absolutamente solo, pero cuenta con compañía cuando una mujer llamada Aurora (Jennifer Lawrence) también despierta. Ambos personajes se convierten en los protagonistas de un viaje en el que suceden muchas cosas inesperadas y a través del cual se abordan diversos temas bajo la particular visión del director.

Desafortunadamente para Pasajeros, la química entre sus protagonistas no resultó en lo que muchos esperábamos y no fue suficiente para sacar adelante la historia, misma que se antojaba más interesante. Los críticos han coincidido en que la historia no es lo que prometía y han destacado sus múltiples errores, mencionando que por breves momentos logra ser algo rescatable.

Para Owen Gleiberman, de Variety, Pasajeros es una historia acerca de un hombre solitario en el espacio y un drama sobre un problema ético:

Una historia de amor con dos de los actores más sexys del planeta y una turbulenta aventura de ciencia ficción. Lo que evita que esta sea una buena película es que intenta ser muchas cosas.

Andrew Pulver, de The Guardian, explica por qué, en su opinión, están desperdiciados los protagonistas:

A pesar de que Lawrence y Pratt tienen química en la pantalla, la forma tan extraña en la que se conocen los personajes extingue lo que los realizadores esperan que se pueda convertir en una interacción cálida y brillante.

Travis Johnson, de Filmink, cuestiona la naturaleza de historia que nos es contada:

Pasajeros no es una historia de amor, es el “Síndrome de Estocolmo” en el espacio.

Kate Erbland, de Indie Wire, califica a la cinta como una fallida historia de amor:

¿Titanic en el espacio? No, pero ciertamente es un desastre.

Tom Huddleston, de Time Out, habla de cómo se desperdició una premisa que pudo dar más:

Presenta una de las situaciones más inusuales que hemos visto recientemente en el cine y la desperdicia

John Hazelton, de Screen International, da una conclusión severa sobre lo que vio:

Pasajeros es en parte un romance, un thriller espacial y una épica en el espacio. Esta película es una desastrosa, y poco convincente, combinación que trata de salir adelante con el carisma de Jennifer Lawrence y Chris Pratt.

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